(KathPress/InfoCatólica) Durante la reunión nacional del partido «Plataforma Cívica» ejecutada el 8 de marzo de este año, Donald Tusk, Primer Ministro polaco y también el representante de dicho partido, realizó varias declaraciones muy polémicas respecto a las leyes sobre el aborto en Polonia.
«Espero que el Fiscal General lleve a cabo una investigación de oficio» en todos los casos de negativa a practicar un aborto invocando la cláusula de conciencia, «independientemente de que las consecuencias de esta negativa sean trágicas o no».
Y continuó: «La cláusula de conciencia no puede ser una justificación para abstenerse de actividades que salvan la vida o la salud de una mujer. Esperamos que el Consejero Nacional y los Consejeros Provinciales de Ginecología revisen todas las cláusulas de conciencia. (...) Cualquier negativa a llevarlas a cabo será denunciada de oficio al Ministerio Fiscal. A partir de ahora, el Ministerio Fiscal deberá investigar por qué alguien ha puesto en peligro la vida y la salud de la mujer, y no por qué alguien ha decidido salvar la salud o la vida de la mujer».
«Nos esforzaremos constantemente por aprobar una ley que dé a las mujeres la oportunidad de tomar decisiones sobre su cuerpo y su maternidad». Tusk está considerado un firme partidario del aborto.
Piotr Semka comentó en la web «Opoka», financiada y gestionada por una fundación de la Conferencia Episcopal Polaca, que el anuncio del primer ministro polaco era «inquietante»: «Al atacar la cláusula de protección de la conciencia, Donald Tusk ataca al Tribunal Constitucional... Mientras tanto, las palabras del primer ministro no provocaron ningún comentario crítico en la mayoría de los medios de comunicación».
Semka criticó que, con este anuncio, la independencia de la fiscalía sea ahora sólo una «fachada». Dijo: «Ya no es el fiscal general, sino el primer ministro, el líder del grupo parlamentario, quien decide a quién debe acusar la fiscalía de qué delitos». Semka explicó que la exigencia de Tusk no puede conciliarse con la libertad de conciencia y religión que garantiza la Constitución polaca.
El comentarista de «Opoka» concluyó: «La cuestión de la protección de la conciencia de los médicos se está reduciendo en las noticias a actos de irresponsabilidad o egoísmo por parte de los médicos. La opinión pública católica debería prestar mucha atención a cómo se aplican las recomendaciones del nuevo Primer Ministro. Pero hoy puede decirse que la ideología pro-aborto empieza a ejercer presión sobre los fiscales».