(Aica/InfoCatólica) «El profundo deseo que tenemos de que el Papa Francisco visite nuestro país se traducirá sin duda en un encuentro muy esperado entre el pastor y su pueblo, nos ayudará a sanar heridas, a crecer en el aprendizaje del diálogo y a renovarnos en el espíritu misionero así podremos tender una mesa generosa en la que haya lugar para todos como insistió tanto en las jornadas de Lisboa», subrayó.
El obispo de San Isidro presidió la misa de apertura de la 123ª Asamblea Plenaria de la CEA que el lunes hasta el viernes se desarrolla en la casa de ejercicios «El Cenáculo», del partido bonaerense de Pilar, donde un centenar ponen el foco en el texto de Síntesis de la primera asamblea general del Sínodo de la Sinodalidad y en cuestiones vinculadas a la Pastoral Vocacional en el país.