(Elcorreo/InfoCatólica) «Ellos actúan en representación de una decisión tomada por la ejecutiva del partido. Por lo tanto, si se tiene que excomulgar a alguien, que sea a su presidente y se deje a los demás en paz», espetó.
El máximo dirigente nacionalista censuró, asimismo, que desde la Iglesia se pretendan mezclar las conciencias personal, moral y religiosa con la realidad social y el debate del proyecto de ley, ante el que, según matizó, «el PNV ha presentado sus cautelas a través de enmiendas». En esta línea, insistió que con la reforma de la normativa sobre la interrupción voluntaria del embarazo «no se está ni favoreciendo ni obligando a nadie a la práctica del aborto», sino que se busca «evitar males mayores de los que se están dando hoy en día». «Estamos en el debate de una realidad social, la de 2009», apostilló.
Urkullu aprovechó por último su intervención para ironizar sobre la fórmula que utilizaría la Conferencia Episcopal para 'castigar' a quienes respalden la nueva ley. «No sé si harán como la Justicia y promoverán juicios rápidos de excomulgación», bromeó. En este sentido instó de nuevo a la Iglesia a hacer una reflexión ajustada a la sociedad actual. «Sería bueno que hicieran una lectura sobre si estamos en Trento o tras el Concilio Vaticano II», concluyó.