(ElCorreoGallego/InfoCatólica) El cargo de obispo auxiliar está vacante desde la pasada década, cuando monseñor Quinteiro Fiuza pasó a hacerse cargo de la Diócesis de Ourense. El próximo treinta y uno de diciembre se abrirá la Puerta Santa de la Catedral, lo que obligará a la iglesia compostelana a realizar un considerable esfuerzo para atender a los cientos de miles de peregrinos que acudirán a la ciudad. Pero es que además la gestión de la Archidiócesis compostelana supone un esfuerzo ímprobo.
Monseñor Barrio recordaba precisamente en el programa que son 1.071 las parroquias que se administran desde la sede de Santiago, y que a pesar de que los vicarios desarrollan una importante labor de apoyo en cuestiones como las confirmaciones, es muchísimo el trabajo que recae directamente sobre la persona del arzobispo todos los días.
Como colofón, a la pregunta directa de si en 2010 estará cubierto este cargo, no dudó en señalar que "yo lo desearía, el trabajo no es poco, y uno va entrando en años", señaló el arzobispo, que además fue obispo auxiliar durante un año y medio, por lo que conoce muy bien la importancia que tiene para un prelado poder contar con este auxilio, especialmente durante la celebración del Año Santo.
Sobre todo pensando que en 2010 está previsto incrementar el número de Misas del Peregrino para evitar colapsos en la Catedral, y también está previsto celebrar liturgias en el exterior de la Basílica, en las plazas del Obradoiro y de A Quintana, y ya están anunciadas numerosísimas expediciones procedentes de toda España.