(GaudiumPress/InfoCatólica) La Iglesia de Santa María de Jesús, erigida en 1426 por el Beato Mateo Guimerá, y situada junto al Convento de los Frailes Menores en la ciudad de Palermo, Sicilia, fue completamente arrasada por un gran incendio.
Además de la pérdida que representa el templo, algo que lamentan mucho los fieles del lugar haber perdido en el incendio fue el cuerpo incorrupto de San Benito de Palermo, el cual se encontraba resguardado en el lugar. De su cuerpo, solo se salvaron unos pocos fragmentos óseos.
San Benito de Palermo vivió y murió allí, por lo que esta parroquia en Argentina se ha vuelto un destino muy especial de peregrinaje para cientos de latinoamericanos.
Asimismo, junto a la fachada de la iglesia de Santa Maria di Gesù, se erguía un muro adornado con múltiples placas que contenían el registro histórico de los diferentes grupos de fieles devotos.
A pesar de que se notificó en cuanto antes a los bomberos del incidente, estos no pudieron atender el caso rápidamente, pues y estaban ocupados con otros sucesos de gravedad. El resultado de esto fue que los mismos civiles de la localidad buscaran salvar la iglesia por sus propios medios.
Aunque San Benito es co-patrono de Palermo, su renombre en la región no es muy extenso. Esto se debe a la abundancia de otros santos que florecieron en el país, lo que ha hecho que este humilde fraile franciscano pase relativamente desapercibido.
Sin embargo, su devoción se expandió de manera sorprendente gracias a los navegantes que llevaban la fe consigo mientras se dirigían al Nuevo Mundo. Fue en Brasil donde San Benito ganó una gran cantidad de devotos.
Otro hecho preocupante es que Italia está experimentando una intensa ola de calor en estos días. En medio de esta situación, el Convento e Iglesia de Santa María de Jesús, ubicado en las laderas del monte Grifone, se encuentra amenazado por un devastador incendio que se propaga sin control.
Se trata de un gran problema, ya que esta iglesia guarda el cuerpo del Beato Mateo Guimerà, quien fue el arquitecto responsable de su construcción. La comunidad está en vilo, esperando que los esfuerzos para controlar el fuego sean exitosos y que el patrimonio histórico y religioso de la iglesia, junto con los restos del Beato Mateo, puedan ser preservados y protegidos.