(Agencias/InfoCatólica) «Jerusalén es una ciudad santa de tres religiones: El judaísmo, el cristianismo y el islam», dijo ayer martes en Ginebra el secretario general del CMI, Jerry Pillay. «Las violaciones del statu quo conducen a la división, la penuria y la violencia».
Laprotesta contra un acto de cristianos evangélicos tuvo lugar el 28 de mayo, según el Consejo Mundial de Iglesias. Los medios de comunicación informaron de que radicales judíos habían gritado y agredido a cristianos evangélicos cerca del Muro de las Lamentaciones. Se informa que escupieron a los participantes y rompieron ventanas.
Liga contra la Difamación: acciones «despreciables» contra los cristianos
La Liga Antidifamación de Israel ha calificado de «despreciables» las acciones contra los cristianos en Jerusalén, añadió el CMI. Los líderes de las iglesias de Jerusalén han expresado repetidamente su preocupación por los ataques y el acoso de elementos extremistas de la sociedad israelí, así como por las graves amenazas a la presencia cristiana en la ciudad y en la región.
El CMI, también llamado Consejo Mundial de Iglesias, incluye a la mayoría de las iglesias ortodoxas, anglicanas, bautistas, luteranas, metodistas, reformadas, unidas e independientes. Representan a más de 580 millones de creyentes. La Iglesia Católica no es miembro. La sede del CMI está en Ginebra.