(Asia News/Infocatólica) Asistieron chicos ytambién chicas, que en las parroquias indias están cada vez más presentes en el servicio litúrgico. Un hecho que subrayó con alegría el arzobispo Francis Kalist, que intervino para llevar su mensaje a los ministros.
La jornada tuvo un tinte vocacional, ya que varias congregaciones religiosas tomaron la palabra para presentar sus experiencias. «Muchas de las vocaciones al sacerdocio han surgido de los monaguillos», recordó a AsiaNews el p. Raj, párroco del santuario, «pero dar importancia a su servicio es también importante, de forma más general, para educar a buenos católicos. En algunas parroquias, la gente todavía no está dispuesta a aceptar a las monaguillas. Pero es una mentalidad que debe cambiar: la sinodalidad también es esto».
A los jóvenes, el arzobispo Kalist les dijo que el servicio en el altar «no es sólo realizar tareas prácticas en la liturgia, sino estar en presencia de Jesús. Es un gran ministerio, que debe realizarse con devoción y en la oración, ayudando así también a quienes participan en la celebración».
«En mi discurso -contó el arzobispo de Pondicherry-Kundalore- abordé además el problema de las castas, que aqueja también a la Iglesia. Sólo podrá eliminarse si desde pequeños se los educa en la comunión de unos con otros, superando cualquier división basada en la casta, la lengua, la cultura o cualquier otra cosa. Por eso también les he confiado esta tarea a estos chicos y chicas, recordándoles que el Espíritu Santo siempre une».