(Agencias/InfoCatólica) El portavoz de la Santa Sede, Matteo Bruni, ha dado a conocer el siguiente comunicado: «Con tristeza les informo que el Papa Emérito, Benedicto XVI, falleció hoy a las 9:34 en el Monasterio Mater Ecclesiae en el Vaticano. Se proporcionará más información lo antes posible».
“With sorrow I inform you that the Pope Emeritus, Benedict XVI, passed away today at 9:34 in the Mater Ecclesiae Monastery in the Vatican.
— Vatican News (@VaticanNews) December 31, 2022
Further information will be provided as soon as possible.” pic.twitter.com/O5dxoPaVkT
Benedicto XVI nació en Alemania el 16 de abril de 1927. Su pontificado se desarrolló del 19 de abril de 2005 hasta el 28 de febrero de 2013, fecha en la que renunció al papado asumiendo el título de Papa emérito, con la intención de dedicarse a la oración y al retiro espiritual. Su renuncia fue anunciada por él mismo días antes, el 11 de febrero, en una decisión excepcional en la Historia de la Iglesia. A partir de ese momento vivió como papa emérito al lado de su sucesor, el papa Francisco, en el monasterio “Mater ecclesiae” del Vaticano.
Elegido Papa
El 19 de abril de 2005, el cardenal Joseph Aloisius Ratzinger fue proclamado el papa 265 de la historia de la Iglesia católica, eligiendo el nombre de Benedicto XVI. Un pontificado que concluyó con su renuncia, que se hizo efectiva el 28 de febrero de 2013, pasando desde entonces a ser papa emérito.
Su elección se produjo el segundo día del cónclave, a la cuarta votación, tras haber liderado el día a día durante la sede vacante como decano del colegio cardenalicio.
En sus primeras palabras en el balcón de la basílica vaticana se presentó como «un simple y humilde trabajador de la viña del Señor».
«Me consuela el hecho de que el Señor sabe trabajar y actuar también con instrumentos insuficientes, y sobre todo confío en sus oraciones», expresó.
«El Señor nos ayudará y María Santísima Madre está de nuestra parte», exclamó ante una abarrotada Plaza de San Pedro el día de su elección.
El papa Benedicto XVI continuó el camino de su predecesor y visitó 24 países de cuatro continentes en 100 días, de los 2.800 de su pontificado, siendo Asia el único continente al que no fue. Publicó las encíclicas Caritas in veritate, Spe Salvi y Deus caritas est.
Viajes
La primera JMJ
Benedicto XVI heredó la Jornada Mundial de la Juventud de Colonia (agosto 2005), de Juan Pablo II. Encuentros que posteriormente Benedicto XVI continuaría en Sydney y Roma.
Al año siguiente, el Santo Padre realiza su segundo viaje, precisamente a la tierra de su antecesor, Polonia (mayo 2006). Uno de los momentos más significativos de su recorrido por la patria de Juan Pablo II fue la visita al campo de concentración de Auschwitz-Birkenau. «Tomar la palabra en este lugar de horror, de acumulación de crímenes contra Dios y contra el hombre que no tiene parangón en la historia, es casi imposible; y es particularmente difícil y deprimente para un cristiano, para un Papa que proviene de Alemania», aseguró Benedicto XVI en este fatídico lugar para la Humanidad.
Primera visita a España y el «discurso de Ratisbona»
Poco después viajaría por primera vez a España, para el V Encuentro Mundial de las Familias en Valencia (julio 2006).
Y luego haría su segunda visita a Alemania (septiembre 2006), donde tuvo lugar el discurso en la Universidad de Ratisbona, donde anteriormente había ejercido como catedrático. Allí, en una clase magistral que trataba sobre la relación entre fe y razón en el cristianismo, el Papa mencionó un diálogo entre el emperador bizantino Manuel II Paleólogo y un persa culto publicada por el teólogo libanés Theodore Khoury en el que se incluía una frase sobre la «conversión por la violencia» en el islam, que provocó cierta polémica en países musulmanes.
Sin embargo, en su siguiente viaje a Turquía (noviembre 2006), un país de mayoría religiosa musulmana, ofreció una clara muestra de entendimiento interreligioso, especialmente en su visita a la Mezquita Azul de Estambul. En ella, Benedicto XVI, acompañado por el Gran Muftí de Estambul, tuvo un momento de recogimiento en dirección a La Meca.
Brasil
Benedicto XVI cruzó el Atlántico como Papa por primera vez para asistir a la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe (CELAM), que tuvo lugar en Aparecida, Brasil, en mayo de 2007. En ese mismo viaje, presidió la canonización de Frei Galvao, el primer santo brasileño.
Pocos meses después viajó a Austria (septiembre 2007), para participar en los actos de conmemoración por el 850º aniversario de la fundación del Santuario de Mariazell.
Abril de 2008 fue un punto fuerte en la agenda internacional de Joseph Ratzinger, cuando visitó Estados Unidos, allí realizó un discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas y tomó la iniciativa y tuvo un encuentro con víctimas de abusos sexuales por parte de religiosos.
Sobre los abusos también reflexionó de forma pública en su siguiente viaje, con destino a la Jornada Mundial de la Juventud de Sydney, en septiembre de 2008. En una charla con la prensa durante el traslado, Benedicto XVI aseguró que «para la Iglesia es de importancia fundamental reconciliar, prevenir, ayudar y también reconocer las culpas en estos problemas», un asunto que no dejaría de tratar en otras visitas, como en Malta o Reino Unido.
Y antes de acabar el año, una significativa visita a Francia (septiembre de 2008), con motivo del 150º aniversario de las apariciones de Lourdes, pero donde también demostró importantes gestos hacia el diálogo con la sociedad y la cultura.
África y Tierra Santa
Su primera visita a África fue en marzo de 2009, cuando recorrió Camerún y Angola en un viaje apostólico, y poco meses después, en mayo de 2009, Benedicto XVI realizó un peregrinación a Tierra Santa llena de símbolos de ecumenismo, como la visita de cortesía al Gran Muftí de Jerusalén en la Explanada de las Mezquitas; o la oración ante el Muro de las Lamentaciones, en la que se dirigió al «Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob» y pidió por la paz en Oriente Medio.
El siguiente a este fue la República Checa (septiembre de 2009), un país culturalmente arrasado por el ateísmo comunista pero cuya pequeña Iglesia se movilizó durante la visita pastoral del Papa, acompañada por numerosos cristianos de Polonia, Alemania, Hungría y Austria.
Durante los dos últimos años de pontificado, el Papa visitó dos veces España: Santiago de Compostela y Barcelona, con motivo del Jubileo en la ciudad gallega y la consagración de la Sagrada Familia como basílica menor (noviembre de 2010); y en la Jornada Mundial de la Juventud de Madrid en el verano de 2011.
Últimos viajes
Durante 2010 también visitó Malta (abril), Portugal (mayo), Chipre (junio) y Reino Unido (septiembre). En junio de 2011, Croacia, y en septiembre, por tercera y última vez, Alemania.
Sus últimos traslados fueron de nuevo a África, con la presentación de la exhortación apostólica ‘Africae Munus’ en Benin (noviembre 2011); a América, con las visitas a México y Cuba en marzo de 2012 (incluido un breve encuentro con Fidel Castro); y Oriente Medio, con la entrega en Líbano de la exhortación postsinodal ‘Ecclesia in Medio Oriente’ (septiembre de 2012). Confirmado, pero pendiente, se quedó Brasil y la JMJ en Río de Janeiro, un viaje que realizó ya el papa Francisco.
Renuncia
En una sorprendente e histórica decisión, Benedicto XVI anunció el 11 de febrero de 2013 su renuncia al pontificado. En aquella ocasión dijo que debido a su avanzada edad (estaba por cumplir 86 años) ya no tenía fuerzas para ejercer de forma adecuada el ministerio petrino. Además, precisó que, desde el 28 de febrero de 2013 de ese año, a partir de las 8 (hora local), la sede de Pedro quedaba vacante.
Precisamente el día de su renuncia se produjo un hecho que muchos consideraron como altamente significativo. El fotógrafo Alessandro Di Meo, de la agencia ANSA, fotografió un rayo que caía en la cúpula de la basílica de San Pedro, en el Vaticano. Explicó así lo ocurrido:
«La cámara estaba apoyada en una valla, no sobre un trípode. El tiempo de exposición fue de 8 segundos, con diafragma 9 y con una sensibilidad de 50 ISO. El objetivo gran angular me permitió incluir a toda la iglesia en el marco».
La imagen fue compartida miles de veces en las redes sociales y publicada en diarios y televisiones de todo el mundo.
Biografía hasta ser elegido Papa
Joseph Ratzinger nació el 16 de abril de 1927 en Marktl (Baviera), diócesis de Passau, en el seno de una familia de agricultores alemanes de profundas convicciones católicas. Su progenitor, Joseph, desempeñaba, además, el cargo de comisario de la gendarmería e hizo asimismo de profesor de su hijo, lo que con seguridad marcó el carácter tímido y retraído del futuro Papa. En la familia fue clave el papel de la madre, Maria Peintner, que ejercía las tareas domésticas y cuidaba de la buena marcha de sus otros dos hijos, Georg y Maria.
Realizó estudios de filosofía y de teología en el ateneo de Munich y en la escuela superior de Freising, hasta que en junio de 1951 fue ordenado sacerdote. Los dos años siguientes los ocuparía en preparar la tesis de doctorado, un ensayo sobre San Agustín que fue calificado con un cum laude. En 1957 inició su periplo como profesor de teología dogmática en el seminario de Freising, hasta que dos años después sería nombrado catedrático de la Universidad de Bonn (1959-1963).
El 24 de marzo de 1977, Pablo VI lo nombró arzobispo de München und Freising. El 28 de mayo de ese mismo año recibía la consagración episcopal. Fue el primer sacerdote diocesano que asumió después de 80 años el gobierno pastoral de la gran diócesis bávara.
Creado cardenal por el Papa Pablo VI en 1977, fue relator en la V Asamblea General del Sínodo de los Obispos (1980) sobre el tema: «Los deberes de la familia cristiana en el mundo contemporáneo» y presidente delegado de la VI Asamblea sinodal (1983) sobre «Reconciliación y penitencia en la misión de la Iglesia».
El 25 de noviembre de 1981 fue nombrado por San Juan Pablo II prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe; presidente de la Pontificia Comisión Bíblica y de la Pontificia Comisión Teológica Internacional. Desde entonces, y hasta su elección como Papa, fue la mano derecha del papa polaco en todo lo que tenía que ver con la doctrina católica.