(Fides/InfoCatólica) La agencia de noticias Fides ha entrevistado a Mar Awa III , el Patriarca de la Iglesia Asiria de Oriente . La iglesia dejó de estar en plena comunión con la Santa Sede tras el Concilio Ecuménico de Éfeso (431).
Cuando se le pidió que comentara sobre el sínodo, el prelado dijo que la auténtica sinodalidad «es más adecuada para manifestar el consenso en torno al 'depositum fidei' [depósito de la fe], y para custodiarlo juntos».
Unas respuestas que seguro no gustarán mucho a orillas del Rin y de algunos más cerca del Tiber
En el proceso sinodal iniciado en la Iglesia católica, algunos siguen sugiriendo mirar a las Iglesias de Oriente para «aprender» la sinodalidad. En la experiencia de las Iglesias de Oriente, ¿cuál es el criterio que guía y puede hacer fructífero eclesialmente el ejercicio de la sinodalidad?
MAR AWA III: La dinámica sinodal de la Iglesia consiste en caminar juntos en la fe de la Tradición Apostólica. La modalidad sinodal sirve para preservar y confirmar la unidad de la fe en este camino, facilitándolo para todos y liberando a todos de cargas innecesarias y prácticas eclesiales que lo obstaculizan. Por tanto, el criterio para evaluar la validez y la fecundidad de un proceso sinodal es si este, en el tiempo presente y en la condición histórica actual, ayuda a todos a caminar en la fe de los Apóstoles custodiada por la Tradición.
El ejercicio de la sinodalidad, si es realmente el camino de todos los bautizados y de todos los obispos como sucesores de los Apóstoles, no puede servir nunca para apartarse de la Tradición Apostólica, de la fe que nos han transmitido los Apóstoles y que une a la Iglesia católica con las antiguas Iglesias de Oriente. Compartimos el mismo ‘Depositum fidei’ recibido de los Apóstoles.
En muchos casos, el camino sinodal se presenta como un proceso dialéctico entre diferentes posiciones que buscan el consenso para mantener o cambiar la posición de la Iglesia en una agenda de temas eclesial y doctrinalmente sensibles. Con dinámicas que se parecen a aquellas políticas y parlamentarias...
MAR AWA III: Alguien me ha mencionado esto. Tal vez se corra este riesgo al pasar de una gestión centralizada en la que todo está en manos de una sola persona a un modo sinodal de conducción de las dinámicas eclesiales. Sin embargo, el modelo sinodal practicado en las Iglesias de Oriente no es interesante porque estar más cerca de los sistemas modernos de gestión del poder, sino porque es más propicio para manifestar el consenso en torno al ‘Depositum fidei’, y para custodiarlo juntos. Una dinámica sinodal auténtica surge precisamente del hecho de que los obispos y todos los bautizados caminan juntos en la misma fe, y convergen en la búsqueda conjunta de las formas y prácticas más adecuadas para dar testimonio de esta misma fe en el tiempo presente. Me imagino que la mayoría de los obispos católicos también comparten el deseo y la voluntad de mantener la doctrina tradicional, también en temas como el matrimonio.
Si las dinámicas sinodales expresan el caminar de toda la Iglesia siguiendo los pasos en la fe de los Apóstoles, no pueden ser utilizadas para abrir fisuras entre los miembros de la Iglesia en cuestiones de fe o de moral. Más bien, el ejercicio de la sinodalidad sirve para mantener la unidad de las distintas sensibilidades, en el mismo camino, incluidas las de quienes desearían una mayor adaptación a la mentalidad del mundo actual.