(InfoCatólica) Esta es la descripción del PCE que aparece en la web de Correos:
El 15 de abril de 1920 se crea el Partido Comunista Español, conocido como el de los cien niños por su origen en las Juventudes Socialistas. Un año más tarde surgirá un segundo destacamento, el Partido Comunista Obrero Español, que, tras la intervención de la Internacional Comunista para unir a los dos partidos, dará como resultado el Partido Comunista de España el 14 de noviembre de 1921. En marzo de 1922 celebró su primer congreso. Una historia con muchos rostros de mujeres y hombres que decidieron comprometerse para cambiar la realidad de un país injusto y desigual.
Al poco tiempo de constituirse se enfrentó a la represión de la dictadura del general Miguel Primo de Rivera. Con la Segunda República tuvo un momento de gran desarrollo, en especial tras la constitución del Frente Popular y por su papel en la guerra civil, cuando participó con varios ministros en el gobierno, bajo el liderazgo del sevillano José Díaz y la vizcaína Dolores Ibárruri “Pasionaria”
Durante el régimen franquista, a pesar de las duras condiciones de clandestinidad, el PCE se convirtió en el motor de las fuerzas que lucharon por la democracia. Fueron miles, mujeres y hombres, quienes promovieron un nuevo sindicalismo desde la base, apegado a cada centro de trabajo, sociopolítico en la reivindicación de derechos laborales y libertades políticas, dos caras de una misma moneda que era imposible separar: las Comisiones Obreras. Al mismo tiempo surgió un poderoso movimiento vecinal, universitario, feminista e, incluso en el seno de la iglesia católica, que contribuyó a reconstruir una sociedad civil democrática.
El PCE fue legalizado en la semana santa de 1977. Tras la instauración del régimen democrático en 1978, el PCE participó en la elaboración de la Constitución Española y en el desempeño del sistema de partidos. Desde 1986 lo hace en el seno de Izquierda Unida. Celebra su centenario con un amplio programa de actividades políticas y culturales.
Correos no dice nada de los horrendos crímenes practicados por los comunistas, de los que es testigo privilegiado el cementerio de Paracuellos, conocido como la «Catedral de los mártires», ni del hecho de que el partido estaba sometido a la obediencia al régimen soviético, cuya naturaleza democrática era evidentemente inexistente. De hecho, a día de hoy las principales dictaduras en el mundo son comunistas o islamistas.
En las redes sociales se han producido muestras de rechazo a la iniciativa de Correos. El partido Ciudadanos recuerda que el Parlamento Europeo condenó tanto el nazismo como el comunismo:
Conmemorar el siglo de vida del partido de la hoz y el martillo es conmemorar el odio, el crimen y la miseria. Contraviene, además, la resolución europea de 2019 sobre el comunismo y el nazismo. Mancha la imagen de España y es una vergüenza. El presidente de Correos debe dimitir. pic.twitter.com/M3fTHo2SX5
— Ciudadanos 🇪🇸🇪🇺 (@CiudadanosCs) November 10, 2022
Destaca especialmente la reacción del ruso Gary Kaspárov, ex-campeón mundial de ajedrez:
¡Qué vergüenza! A “Victims of Communism” stamp would be far more appropriate. These symbols represent imperialism, genocide, poverty, and gulag. Will a swastika stamp be next? https://t.co/wtHh2IzPMM
— Garry Kasparov (@Kasparov63) November 10, 2022