(Aica/InfoCatólica) «Adelante, que los laicos asuman su bautismo, su función de laicos, y respeten la singularidad de cada una de las Iglesias, porque la Iglesia universal no es la Iglesia uniforme, no, es universal, respetando la particularidad de cada Iglesia», es la invitación que concluye el videomensaje enviado por el Papa a los participantes en la Conferencia Internacional de la Federación de Conferencias Episcopales de Asia (FABC, por sus siglas en inglés), que se está celebrando en Bangkok, Tailandia, hasta el 30 de octubre.
Francisco recordó los inicios de la reunión de obispos en 1970 y la visita del papa san Pablo VI a Asia. Allí, evocó el Santo Padre, «encontró un continente de grandes masas». «La mayoría de ellos eran jóvenes, y Asia se reconocía como hogar de diferentes culturas y religiones».
En aquel entonces, dijo el Papa, los obispos constataron que las masas «se estaban despertando del fatalismo a una vida digna del hombre». También los jóvenes se estaban despertando: eran idealistas, conscientes, preocupados, impacientes e inquietos. Las sociedades culturalmente diversas - dijo - se estaban despertando, para convertirse en una verdadera «comunidad de pueblos».
El significado de ello era que la Iglesia en Asia estaba llamada a ser «más auténticamente la Iglesia de los pobres, la Iglesia de los jóvenes y una Iglesia en diálogo con los compañeros asiáticos de otras confesiones».
Ahora que los obispos se reúnen nuevamente, Francisco expresa que desea acompañarlos «en el trabajo de fraternidad e intercambio de ideas que llevarán a cabo». Y subrayó que es importante que las Conferencias Regionales se reúnan con cierta asiduidad, porque «al hacerlo la Iglesia se va formando, se va fortaleciendo en el camino».
La pregunta fundamental que plantea el Pastor de la Iglesia Universal a los miembros de la Federación es: ¿Qué dice el Espíritu a las Iglesias de Asia? Eso es - sostiene Francisco - a lo que esta reunión de Conferencias Episcopales asiáticas «debe responder».
La Asamblea fue inaugurada ayer, 12 de octubre, en Bangkok, en el Centro Pastoral Baan Phu Waan. Participan más de 150 obispos de 29 países asiáticos, así como unos 50 invitados, procedentes también de los dicasterios de la Santa Sede. Centrada en el tema «El camino común de los pueblos asiáticos: y tomaron otro camino», la asamblea tiene un significado jubilar, ya que celebra el 50º aniversario de la fundación de la FABC, creada en 1970. De hecho, el encuentro debía celebrarse en 2020, pero la pandemia obligó a posponerlo y sólo ahora los obispos asiáticos pueden experimentar la alegría de una celebración «en presencia».
Tal y como comunicó la FABC, la presente conferencia tiene como objetivo hacer un balance de medio siglo de actividades de la Federación, tomar conciencia de las nuevas realidades que surgen en las sociedades del continente y en las Iglesias asiáticas, y renovar el camino «en busca del rostro de Jesús en Asia».
La misa de apertura de la asamblea estuvo presidida por el presidente de la FABC, cardenal Charles Maung Bo, arzobispo de Yangon (Myanmar), en tanto la misa de clausura está prevista para la mañana del 30 de octubre en la Catedral de la Asunción de la Virgen de Bangkok y será presidida por el cardenal Luis Antonio Gokim Tagle.
La FABC es una asociación de las Conferencias Episcopales del Sur, Sudeste, Este y Centro de Asia, fundada para mejorar la cooperación entre los obispos de Asia. Actualmente, 19 conferencias episcopales regionales son miembros. La Secretaría Central se encuentra en Bangkok, Tailandia.
La idea de una Federación surgió tras el Concilio Vaticano II. En noviembre de 1970, el san Pablo VI visitó Asia (aterrizando en Filipinas) por primera vez en la historia. En esa ocasión se aceptó la propuesta del difunto cardenal coreano Stephen Kim Sou-hwan (1922-2009) de establecer una asociación permanente de los obispos de Asia. A la reunión asistió también el papa Pablo VI, que animó a los obispos de Asia a unirse y dar los pasos necesarios. En 1971 se redactó un estatuto para la organización permanente, que fue presentado a la Santa Sede y aprobado por ella ese mismo año. La FABC celebró su primera asamblea general en 1974 en Taipei, y después, cada cuatro años, su asamblea general, hasta la 12ª asamblea celebrada en 2016.