(CEC/InfoCatólica) El arzobispo mostró su dolor y preocupación por estos actos vandálicos y demás violencia que sucedió en medio de las manifestaciones con motivo del llamado «día del aborto».
«Rechazamos toda forma de violencia en los actos y en las palabras, exigimos respeto civil por parte de los promotores y participantes en las marchas y protestas, solicitamos a las autoridades que garanticen la vida, honra y bienes de la ciudadanía».
El prelado asegura que si bien se debe respetar el derecho a la protesta pacífica, con «el firme compromiso de fortalecer la cultura democrática», promulgada según la Sentencia STC 7641 de 2020, por la Corte Suprema de Justicia, esta debe hacerse «siempre por los caminos racionales y humanos».
«Si queremos un verdadero desarrollo humano integral para todos en Colombia, debemos privilegiar el diálogo social y las vías establecidas en las normas constitucionales. Recurrir a las vías de hecho es, en todo caso, un acto que deshumaniza y destruye el tejido social porque obstaculiza la paz y la sana convivencia».
Finalmente, el arzobispo advirtió que en ningún momento la Iglesia responderá a estos actos vandálicos con violencia. «Como discípulos misioneros de Jesucristo estamos dispuestos siempre a construir una cultura del encuentro, que supera el odio, la venganza y la violencia en todas sus formas».
Contexto
Los hechos se dieron este miércoles 28 de septiembre, en medio de la jornada de protestas a favor del aborto, en la que varias personas salieron a manifestarse en el marco del Día de la Acción Global por un Aborto Legal y Seguro, allí un grupo de mujeres integrantes de diferentes colectivos feministas intentaron prender fuego a la puerta de la Catedral y pintaron la fachada con grafitis.
Cabe recordar que el 21 de febrero de este año la Corte Constitucional fijo el tiempo límite para la interrupción voluntaria del embarazo a la semana número 24. No obstante, hay una demanda en contra de esta decisión que podría modificar esta determinación.
Ataques anteriores contra la Catedral Primada
El 20 de marzo de este año, un grupo de personas encapuchadas interrumpió una misa en la Catedral Primada, en el centro de Bogotá. En video quedó registrado el momento en que varias mujeres, que ocultaban sus rostros bajo capuchas, se mueven dentro del recinto religioso en el que se celebraba una Eucaristía.
Luego se subieron a las bancas y empezaron a gritar arengas que leían de hojas de papel. Inicialmente, una persona trata de disuadirles, pero ellas se mantienen en su acción. En un momento, dos mujeres los empujan; pero, nuevamente, continuaron con su discurso.
A través de Twitter, una persona identificada como 'Simona' atribuyó el hecho a un grupo denominado R.A.R. y aseguró que se trataba de un performance. Al parecer, se trataría de la misma persona que, en mayo de 2021, posó frente a la sede de revista Semana, cuya fuente fue teñida de color rojo.