(Fox/InfoCatólica) El actor Shia LaBeouf, conocido por protagonizar las tres películas de Transformers, Indiana Jones y la Calavera de Cristal, Yo Robot u otras más subidas de tono, anunció que se había convertido al catolicismo mientras trabajaba en su próxima película «Padre Pío», en el que interpreta al santo.
«Ahora sé que Dios estaba usando mi ego para atraerme hacia Él, alejándome de los deseos mundanos. Todo estaba sucediendo simultáneamente», confesaba LaBeouf en una entrevista realizada por el Obispo de Winona-Rochester (Estados Unidos), Mons. Robert Barron, en un programa de YouTube de su ministerio «Word on Fire».
El actor relata que se acercó por primera vez a la Iglesia mientras vivía en un monasterio de frailes capuchinos franciscanos para comprender mejor al Padre Pío, papel que desempeña LaBeouf en la próxima película dirigida por Abel Ferrara, que explora la vida del místico franciscano capuchino.
Tentaciones suicidas y proceso de búsqueda
Al iniciar el proyecto, LaBeouf dijo que se encontraba en el punto más oscuro de su vida tras una serie de escándalos públicos. Se sintió atraído por la espiritualidad y se unió a diversos grupos religiosos para encontrar un sentido, luchando contra los pensamientos de impotencia y suicidio.
«Tenía una pistola sobre la mesa. Me iba a ir de aquí», recordó Shia en la entrevista de casi 90 minutos. «No quería seguir vivo cuando todo esto sucedió. Experimenté una vergüenza como nunca antes había experimentado: el tipo de vergüenza que te hace olvidar cómo respirar. No sabes a dónde ir. No puedes salir a buscar un taco».
«Pero también tenía este profundo deseo de aguantar», añadía.
El actor describió haber encontrado la fe durante su investigación por sorpresa, diciendo que su mentalidad al entrar en la película estaba centrada en su carrera, no en Dios.
«El acercamiento se produjo. Ya estaba allí, no tenía dónde ir. Era la última parada del tren. No había ningún otro sitio al que ir, en todos los sentidos», dijo LaBeouf en la entrevista.
«Dios estaba utilizando mi ego»
Y continuó: «Ahora sé que Dios estaba utilizando mi ego para atraerme hacia Él. Me alejaba de los deseos mundanos. Todo ocurría simultáneamente. Pero no habría habido ningún impulso para que me subiera a mi coche y condujera [al monasterio] si no pensara: 'Oh, voy a salvar mi carrera'».
Sin embargo, mientras investigaba e interpretaba el papel, LaBeouf dijo que se sentía «engañado» por Dios.
«Y cuando llegué aquí, ocurrió un cambio. Fue como cuando juegas con un trilero. Fue como si alguien me hubiera engañado, me pareció», relató el actor. «No de una manera mala. En el sentido de que no podía verlo. Estaba tan cerca que no podía verlo. Lo veo de forma diferente ahora que ha pasado el tiempo».
LaBeouf describió que hablar de sus sentimientos y aprender sobre la comprensión cristiana del pecado y el perdón fue clave para salir de una época oscura de su vida.
El perdón y el arrepentimiento
La estrella de Transformers también dijo que aprender del perdón y el arrepentimiento fue fundamental para salir de la depresión y conocer la Misericordia de Dios.
«Vi que había otras personas que han pecado incluso más allá de lo que jamás podría imaginar y que se encuentran con Cristo. Eso me hacía sentir que tenía esperanza», aseguró.
En la entrevista de más de una hora, LaBeouf también reveló su experiencia con el Rosario, la Eucaristía, la lectura de las Confesiones de San Agustín, su gusto por la Misa tradicional en latín y la paz que encontró después de reconciliarse con su madre.
Rosario, Visita al Santísimo y Misa tradicional
La estancia con los franciscanos fue un gran impulso. Desconocía lo que era la oración y el silencio. Uno de los hermanos le dijo: « 'Vete a esa capilla con el Santísimo y estate callado. Simplemente siéntate y guarda silencio'». Así descubrió que la oración es un proceso con cuatro partes: «El silencio te lleva a pensamientos de amor; los pensamientos de amor te llevan a actos de amor; y los actos de amor te conducen a la paz. Eso me impactó profundamente».
Añadió que «estaba aprendiendo a rezar el Rosario», añade, «abre una pausa en mi cabeza. Hace la oración algo táctil, es una gran oración: me saca de lo cognitivo y me introduce en lo físico, y eso abre un paréntesis en mi continuo monólogo interior. Y lo hace presente: está aquí, lo tienes en la mano».
Al meterse en el papel del Padre Pío quedó impresionado al representarle celebrando la Santa Misa. Quería hacerlo bien y para ello asistió a la Misa tradicional, que era la que celebraba el Padre Pío, en latín:
«La misa tradicional me afectó profundamente. Porque no se estaba haciendo como para venderme algo, sino como algo que me estaba introduciendo en algo muy especial. Activaba algo en mí, como que había encontrado algo
Hay lenguajes de los que no necesitas conocer las palabras, y eso es lo que yo sentía al ver las misas del Padre Pío; experimentaba profundamente lo que allí estaba pasando, y eso es más potente que conocer todas y cada una de las palabras, porque te saca de lo intelectual y te introduce en el sentimiento y en la belleza
La misa tradicional me introduce en la esfera del sentimiento de lo sagrado a lo que te conectas, precisamente porque no sé lo que las palabras significan»
Al pensar en el bautismo descubrió que su tío ya lo había bautizado, aunque él no lo recordaba.
La película tiene previsto su estreno en el Festival Internacional de Cine de Venecia de 2022, que se llevará a cabo del 31 de agosto al 10 de septiembre.