(KNA/InfoCatólica) «No debemos seguir un camino alemán, que al final conduzca a una iglesia nacional alemana», dijo Meier entre los aplausos de los presentes en el congreso.
El obispo calificó de omisión el hecho de que la Iglesia católica no haya elaborado un catálogo de criterios sobre la «jerarquía de verdades» tras el Concilio Vaticano II (1962-1965) y advirtiò que no quiere pensar que pasará si no se crea un marco para el Camino Sinodal que esté en armonía con Roma.
El presidente del congreso, Hubert Gindert, dijo que el Camino Sinodal estaba utilizando el escándalo de los abusos sexuales como «palanca para otros objetivos». La Iglesia católica «ya estaba mucho más adelantada que la mayoría de la sociedad» a la hora de asumir y tratar el escándalo de los abusos.
Al mismo tiempo denunció que las «voces preocupadas» de los obispos de la Iglesia universal por la deriva de la Iglesia en Alemania fueron «desechadas con arrogancia» por los responsables del Camino Sinodal.