(InfoCatólica) Tal como recoge la página de la Conferencia Episcopal de Polonia, el Bautismo de Polonia es un acontecimiento decisivo para el origen de Polonia y la formación de su identidad cristiana. Hace 1056 años Polonia se convirtió en un estado cristiano - dijo el arzobispo Stanisław Gądecki, presidente de la Conferencia Episcopal Polaca, en el aniversario del bautismo de Polonia.
El Presidente del Episcopado destacó que con su bautismo, Polonia, comenzó a existir históricamente. «Por lo tanto, no es casualidad que a partir de 2019 cada aniversario de este acontecimiento sea una fiesta nacional», añadió. También recordó las palabras de San Juan Pablo II, quien dijo que «No se puede entender la historia de Polonia sin Cristo».
«Este año celebramos por cuarta vez la Fiesta del Bautismo de Polonia. Es una oportunidad para darse cuenta de que el Decálogo es la fuente de todo el orden moral y social que ha dado forma a nuestra Patria», subrayó el arzobispo Gądecki.
«Que la herencia de las generaciones anteriores, la tradición, los valores y la fe sigan siendo un elemento permanente de nuestra cultura», dijo el Presidente episcopal. «Deseo que todos respetemos cada vez más nuestra herencia cristiana y estemos orgullosos de ella». - añadió.
El bautismo del Príncipe Mieszko I
El bautismo del príncipe Mieszko I es un acontecimiento decisivo en la historia del estado y la nación polaca, se le considera el comienzo simbólico del estado polaco. El bautismo también tuvo una importancia política, cultural y de identidad fundamental: introdujo al estado polaco emergente en el círculo de la civilización de Europa occidental. La fecha simbólica del Bautismo de Polonia es el Sábado Santo, 14 de abril de 966.
Como señala el ministerio de Educación y Ciencia de Polonia, el príncipe Mieszko I fue bautizado probablemente el Sábado Santo, 14 de abril de 966, como era costumbre de la época, en la noche de espera de la Resurrección del Señor. Los hallazgos arqueológicos sugieren que el bautismo podría haber tenido lugar en la isla Ostrów Lednicki, cerca de la fortaleza de Gniezno. Se cree que su corte fue bautizada junto con el príncipe.
Mieszko decidió bautizarse en el rito latino a través de los checos. La entrada en el cristianismo occidental estuvo precedida por su matrimonio con la princesa Dobrawa en 965. Los primeros misioneros también procedían de Bohemia.