(AFP/laCroix/InfoCatólica) Fue la respuesta el cardenal Christoph Schönbornn, en una entrevista publicada el sábado por el diario bávaro Passauer Neue Presse, a la cuestion planteada de que si la “reputación de la Iglesia católica” se habría debilitado precisamente por el “intento de conseguir la vuelta a Roma de los tradicionalistas de la FSSPX”, mientras que ellos “parecen querer sostener sus posiciones preconciliares”.
Según el arzobispo de Viena, “no se trata de que Roma vaya a consentir cualquier cosa a los lefebvristas”, sino que les serán "claramente indicados" los puntos que "no son negociables para la Santa Sede", “lo que incluye conclusiones fundamentales del Concilio Vaticano II, como su posición respecto al Judaismo, otras religiones no cristianas, otras iglesias cristianas y sobre la libertad religiosa como derecho humano fundamental”.
En la última semana se han conocido los nombres de los miembros del grupo de expertos encargado por el Vaticano de dialogar con los lefevbristas. El grupo estará presidido por el secretario de la comisión Ecclesia Dei –integrada por Benedicto XVI en la Congregación para la Doctrina de la Fe–, Mons. Guido Pozzo, eminente teólogo, e integrado por el suizo P. Charles Morerod, O.P., el alemán P. Karl Josef Becker, S.J. y el español P. Fernando Ocáriz, Vicario general del Opus Dei. Por parte de la FSSPX es otro español, monseñor Alfonso de Galarreta, en responsable del diálogo.
Charles Morerod es el nuevo secretario de la Comisión Teológica Internacional y decano de la facultad de Filosofía de la Universidad Santo Tomás de Aquino. Karl Becker es un teólogo cercano a Benedicto XVI y antiguo profesor de la Universidad Gregoriana. Y Fernando Ocáriz es profesor de la Universidad de la Santa Cruz y vicario general del Opus Dei y su elección podría estar relacionada con sus conocimientos sobre la declaración conciliar “Dignitatis humanae”, sobre la libertad religiosa.