(ACIPrensa/InfoCatólica) La red social Twitter y sus tendencias en la región de México estuvieron encabezadas por el hashtag #LibertadReligiosa, el cual llegó a estar de número 2 en las tendencias del día este 21 de enero.
El hashtag iba acompañado de miles de mensajes en protesta contra la sentencia dada por la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) hacia dos cardenales y dos sacerdotes católicos, quienes incentivaban un voto cristiano que estuviera a favor de la vida, la familia y el bien común.
Otra tendencia que se encontraba dentro del top 10 fue #SegobNoLosToques, un lema creado por los ciudadanos para exigirle a la Secretaría de Gobernación del gobierno de Andrés Manuel López Obrador que no sancionara a los cardenales y sacerdotes.
El fallo realizado por la Sala Especializada del TEPJF, confirmado el 19 de enero por la Sala Superior, fue en contra del Arzobispo Emérito de Guadalajara, Cardenal Juan Sandoval Íñiguez, y el exrector Universidad Pontificia de México (UPM), P. Mario Ángel Flores Ramos, dejando fuera de este grupo y sin sanción al Obispo de Cancún-Chetumal, Mons. Pedro Pablo Elizondo Cárdenas.
Se les acusa de haber desobedecido el «principio de separación Iglesia-Estado» dictado en la Constitución del país.
Según ACI Prensa, a pesar de no ser mencionados explícitamente, dos sacerdotes más podrían verse afectados por dicha sentencia, estos son: Arzobispo Primado de México, Carlos Aguiar Retes; y al P. Ángel Espinosa de los Monteros, sacerdote de la congregación de los Legionarios de Cristo.
La sanción que se les impondrá será definida por la Secretaría de Gobernación del gobierno de López Obrador, y puede ir desde una amonestación hasta una multa de tres millones de pesos, lo que en dólares sería una cifra de aproximadamente 150 mil.
En crítica y reclamo al fallo realizado por el TEPJF, Mons. Ramón Castro Castro, el secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano, difundió un video mensaje donde expresó que sus medios «son violatorios de uno de los derechos humanos más importantes en un Estado democrático, la libertad de expresión».
Añadió que «ninguno de los ministros de culto se manifestó a favor o en contra de un candidato o de un partido político específico, sino que en ejercicio de su libertad de expresión hicieron pronunciamientos personales sobre la realidad social del país».
