(UCANews/InfoCatólica) Las Obras Misionales Pontificias (OMP) de Australia han lanzado una campaña de donaciones para apoyar a las monjas católicas en su misión de servir a los niños pobres y desfavorecidos de Tailandia.
La campaña, justo antes del Mes Mundial de las Misiones en octubre, busca ayudar al trabajo de las Hermanas del Buen Pastor que ofrecen un apoyo vital para incluir educación y alojamiento para niños vulnerables en la capital tailandesa, Bangkok, informa la agencia de noticias Fides del Vaticano.
En Tailandia, las monjas del Buen Pastor operan un jardín de infancia en el área de Din Daeng de Bangkok que atiende a niños de entornos vulnerables y desfavorecidos.
Las Obras Misionales Pontificias son un grupo global de organizaciones misioneras católicas bajo la jurisdicción del Papa que apoyan las actividades misioneras de la iglesia y las iglesias jóvenes en los territorios de misión.
El padre Brian Lucas, director nacional de PMS Australia (también conocido como Catholic Mission Australia) dijo que todos los fieles bautizados están llamados a apoyar a las iglesias misioneras a través de la oración y el apoyo material.
«Cada año, el penúltimo domingo de octubre se dedica como Domingo Mundial de las Misiones y este es un recordatorio formal de la importancia del trabajo de la misión», dijo el Padre Lucas.
«No podemos dejar de hablar de lo que hemos visto y oído, y nuestro bautismo nos llama a ser discípulos misioneros. A través de la oración y el apoyo material llegamos a las iglesias misioneras, aquellas que son perseguidas, frágiles y carecen de los recursos que usualmente tomamos para ayudar», añadió el sacerdote.
La Hermana del Buen Pastor Chalaad y otros hermanos han estado dirigiendo el hogar para niños y también un taller de capacitación de habilidades para mujeres pobres y desfavorecidas.
Desde entonces, el jardín de infantes se ha expandido para acoger a los niños locales que de otro modo se perderían de la educación preescolar crucial.
«La mayoría de los niños en el centro provienen de familias pobres locales», dijo la hermana Chalaad.
«Vemos que la educación es importante. Si los niños tienen la oportunidad de estudiar o prepararse bien para ir a la escuela, tendrán buenas oportunidades de prosperar en la vida. Mientras trabajo con los niños, puedo velar para que los niños pueden ser buenas personas en el futuro».
La monja citó el ejemplo de Samorn y su hija de cinco años, Kusa.
Samorn no terminó su educación primaria y se convirtió en trabajadora a tiempo completo cuando solo tenía 12 años.
Sin embargo, Samorn quiere que Kusa tenga éxito en su vida y haga mejores cosas.
«Quiero que mi hija termine la escuela, quiero que pueda mantenerse a sí misma en el futuro», dijo.
Actualmente, el jardín de infancia tiene más de cien niños. Cada niño tiene las instalaciones adecuadas para recibir educación, atención médica y comidas nutritivas. También prevé su formación moral para desarrollar una autoestima positiva en un entorno en el que puedan aprender y crecer de forma segura.
Las Hermanas del Buen Pastor es una congregación religiosa internacional de mujeres católicas fundada en 1835 en Francia. Un carisma importante de la orden es promover la protección, el bienestar y la rehabilitación de mujeres y niñas. El grupo también ha estado a la vanguardia para poner fin a los abusos contra mujeres y niñas y la trata de personas.
Las monjas del Buen Pastor llegaron a Tailandia en 1965, siguiendo una invitación de la Iglesia Legionarios del Santo Redentor en Bangkok en 1961.
Allí las monjas iniciaron el Hogar del Buen Pastor para niñas y mujeres en Bangkok, que incluía programas de educación y capacitación.
Desde entonces, las monjas han estado sirviendo a mujeres y niñas, incluidas embarazadas y víctimas de relaciones abusivas, explotación, prostitución y trata, así como a trabajadores migrantes indocumentados de Myanmar en varias partes del país, como Nongkhai, Pattaya, Phuket y Chiang Rai.
