(ACN/InfoCatólica) El Padre Giovanni Scalese, sacerdote Barnabita de la Orden de Clérigos y superior de la misión católica sui iuris en Afganistán, compartió un poco sobre la situación que está atravesando actualmente el país y su retirada, en una invitación al programa de Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) llamado «Perseguidos, pero no olvidados» transmitido a través de Radio María.
¿Qué tal estás? ¿Qué tal el viaje de salida de Afganistán?
Gracias a Dios estoy bien. Nuestra salida de Afganistán ha sido un verdadero milagro. El día después de partir fue cuando se produjo la explosión del atentado. Si no hubiéramos salido ese día quizá no hubiéramos podido irnos.
¿Qué pensamientos tienes de las personas de la comunidad católica que se han quedado en Afganistán?
La comunidad católica en Afganistán es una comunidad sui iuris. Está compuesta exclusivamente por el personal de las embajadas de las instituciones humanitarias, casi todos han dejado Afganistán antes de nosotros. Los pocos que han permanecido, no corren ningún riesgo.
¿Cómo podemos ayudarles?
En este momento la única ayuda que se puede dar es la oración. El pasado domingo el Santo Padre ha hecho una llamada a la oración y el ayuno por Afganistán. Yo mismo he podido experimentar personalmente que la oración unánime de la Iglesia es muy eficaz.
Último mensaje para los oyentes y tantas personas que nos han dicho en estos días que rezan por Afganistán
Viendo que se trata de Radio María España, quiero recordar a los oyentes que el 13 de octubre de 2017, al final del centenario de Fátima, consagramos la misión de Afganistán al Inmaculado Corazón de María. En ese día experimentamos la protección de Nuestra Señora. Esperamos que la Virgen proteja a todo el pueblo de Afganistán.