(ACI Prensa) En una entrevista a CNA, agencia en inglés del Grupo ACI, el P. Dan Brandt dijo que momentos antes de la Comunión, el celebrante principal, Cardenal Blaise Cupich, le pidió que se ubicara para distribuir la Eucaristía.
El sacerdote señaló que se puso nervioso cuando vio a la alcaldesa al inicio de la fila de la Comunión durante el funeral de la policía Ella French, que falleció durante una balacera mientras realizaba una parada de tráfico.
«Sabes algo, yo soy el culpable de eso y estoy mortificado», señaló.
El P. Brandt indicó que él no debía dar la Eucaristía, sin embargo, «en el último segundo el Cardenal Cupich dijo: ‘Voy a sentarme en la Comunión, tú ocupas mi lugar», y resaltó que el fin de semana fue «muy borroso. Estaba durmiendo muy poco».
«De todos modos estoy poniendo excusas, pero sí, ella vino, y puse la Sagrada Hostia en su mano y dije ‘¡Oh!’ y, por supuesto, ya era demasiado tarde. Y yo estaba como diciendo, ‘Dios mío, ten piedad’», lamentó.
El sacerdote se disculpó profundamente por «cualquier escándalo que mi distracción pueda haber causado» y remarcó que «no fue intencional y desearía haber tenido la mente más clara en ese momento».
«O mejor, desearía que el Cardenal hubiera repartido la Comunión porque mi mente estaba pensando en regresar y sentarme para prepararme para lo que faltaba de la Misa y procesión», remarcó.
«No puedo disculparme lo suficiente con los fieles que están molestos por el hecho de que ella recibió la Eucaristía. Eso dependía totalmente de mí y lo reconozco», reconoció. «Fue un error y oro para que sus lectores tengan la misma misericordia que espero que el Señor me dé», agregó.
El Cardenal Cupich celebró la Misa en la iglesia católica St. Rita of Cascia para pedir por el alma de la policía de 29 años, que fue asesinada a tiros en el cumplimiento de su deber durante una parada de tráfico el 7 de agosto.
En su homilía, el Purpurado señaló que la oficial que tenía tres años en el Departamento de Policía de Chicago fue una «mujer de empatía por el sufrimiento de los demás» y «generosa hasta el punto de dedicar su vida a hacer una diferencia en el mundo».
Lightfoot estaba sentada en las primeras bancas de la iglesia durante la Misa y fue la primera en la fila de la Comunión según se aprecia en la transmisión en vivo de la Celebración Eucarística.
Según la asociación de ex alumnos de Washington High School, su alma mater, Lightfoot es miembro de la Iglesia St. James AME Zion en su ciudad natal de Massillon, Ohio, que es parte de una comunidad eclesial metodista.
El mismo sitio web la identifica como fideicomisaria fundadora de Christ the King Jesuit High School, que sirve a miembros de la comunidad afroamericana desfavorecida en el lado oeste de Chicago. Un portavoz de la alcaldesa confirmó que es cristiana.
Lightfoot es la primera alcaldesa abiertamente homosexual de Chicago, así como la primera mujer afroamericana de la ciudad en ocupar ese cargo. Está casada con Amy Eshleman, con quien tiene una hija.
Durante una conferencia de prensa después de la Misa del jueves, Lightfoot, a quien muchos críticos consideran que está en contra del departamento de policías, señaló que espera que su presencia en el funeral sea tomada como una «simple, pero hermosa expresión de solidaridad y apoyo a la Familia French».