(La Vanguardia/InfoCatólica) El declive comenzó en los años noventa y se aceleró con fuerza con la llegada del nuevo milenio. En el 2010, solo el 61% decía ser miembro de alguna iglesia, mezquita o sinagoga. En el 2020 el porcentaje cayó al 47%, convirtiendo por primera vez en mayoría a los estadounidenses que no pertenecen a ninguna.
No es solo que cada vez acudan menos a los templos religiosos. El dato está indisolublemente ligado al aumento del porcentaje de personas que se declaran «ateas, agnósticas o sin ninguna afiliación religiosa» (conocidos en inglés como nones ) que ha pasado en 20 años del 8% al 21%, lo que les convierte en el segundo grupo religioso actualmente en EE.UU, por detrás de los cristianos. En el caso de los millennials (25-40 años) se eleva hasta el 31%, y a un 33% entre los miembros de la llamada generación Z (menores de 24 años).