(Asia News/InfoCatólica) «Conocer, agradecer, escuchar, seguir al Partido»: con este lema, se multiplican en el país las celebraciones por el centenario del nacimiento del Partido Comunista chino.
«Conocer» significa «conocer la historia» del Partido. Para ello es necesario asimilar una profunda educación «comunista». En Fujian, del 12 al 14 de abril, se celebraron algunas conferencias y visitas a lugares significativos del comunismo bajo el título «Ama al Partido, ama a la Patria, ama al Socialismo». Participaron más de 50 representantes de todas las religiones oficiales (budismo, taoísmo, islamismo, catolicismo y protestantismo).
Izado de bandera en templo católico
El relato oficial del acontecimiento subraya la aparición de una «Iglesia de Estado», totalmente obediente al emperador: «se celebró una solemne ceremonia de izado de bandera en la iglesia católica de Changting. Era la primera vez que las cinco religiones principales de la provincia de Fujian celebraban juntas una ceremonia de izado de bandera en un lugar donde se realizan actividades religiosas» (foto 2).
En los últimos días, en Guangdong también se celebraron seminarios sobre «conocer, agradecer, escuchar y seguir al Partido». El 17 de abril, el Comité Permanente de la Iglesia de Guangdong desarrolló los temas de la «Iglesia independiente, autónoma y auto elegida [en los nombramientos y ordenaciones de obispos]». Estos adjetivos de la Iglesia son los que la Asociación Patriótica -y antes, Mao Zedong- siempre ha querido para la Iglesia católica nacional, sometida al poder del Partido (foto 3).
Las comunidades budistas también realizaron celebraciones de «acción de gracias» dedicadas del Partido».
El 15 de abril en Beijing se celebró el segundo seminario sobre la historia del Partido. Estuvo encabezado por Liu Yuanlong, vicepresidente y secretario general de la Asociación Patriótica Nacional, y por Mons. Ma Yinglin, presidente del Consejo de Obispos, uno de los obisposa los que, gracias al acuerdo entre el Vaticano y la dictadura comunista, el papa Francisco levantó la excomunión.
Mons. Yinglin: sin el partido comunista no seríamos felices
«En su discurso de clausura», informa Chronicle, «Monseñor Ma Yinglin subrayó que la historia ha demostrado plenamente que sin el Partido Comunista no habría Nueva China, ni socialismo con características chinas, ni vida feliz para nosotros hoy. La comunidad católica de China debe responder activamente a la iniciativa de 'amar al Partido, amar a la patria, amar al socialismo', apoyar firmemente la dirección del Partido Comunista Chino, apoyar el sistema socialista con características chinas, seguir firmemente el camino del patriotismo y amar y adaptarse activamente a la sociedad socialista» (foto 4).
El 11 de abril fue el turno de Shifang (Sichuan). Presidida por el Pbro. Liu Conghua, hubo una conferencia sobre la historia del Partido, a cargo de Luo Min, subdirector de la Oficina Municipal de Shifang, sobre «Desarrollo del estudio de la historia del Partido y la propaganda educativa en los círculos religiosos». Un representante del Frente Unido, Tang Jun, instó a la Iglesia Católica a «unir el patriotismo y el amor para enseñar la historia del Partido».
Por último en Pascua se asistió a una verdadera muestra de «gratitud» hacia el Partido Comunista en Zhengzhou (Henan). Allí, muchas iglesias están cerradas a causa de la pandemia, pero los cines, restaurantes, fábricas y centros de ocio están abiertos. Sin embargo, un sacerdote, el padre Wang Yuesheng, frente a la entrada de la iglesia cerrada (foto 1), quiso lanzar un evento especial: una exposición dedicada a la «gloriosa historia de la fundación del Partido Comunista». De este modo, hasta se agradece al Partido por tener cerradas las puertas de la iglesia. (B.C.)