(Efe/InfoCatólica) La congregación divulgó el informe anual 2020 titulado «Verdad, justicia y sanación», que recoge los pasos dados en la atención a las víctimas y el desarrollo de ambientes seguros en su seno.
El documento aporta datos de 27 sacerdotes que abusaron en el pasado de alrededor de 170 menores, al menos los que se tiene conocimiento, en su gran mayoría varones de entre 11 y 16 años de edad.
Los curas que cometieron abusos representan un dos por ciento de los 1.380 legionarios de Cristo ordenados sacerdotes a lo largo de toda la historia de la Congregación, fundada en 1941. Los casos expuestos se dieron en Brasil, Chile, Colombia, Venezuela, España, Estados Unidos y México, entre otros países.
Se ha dado a conocer el «Informe anual 2020 'Verdad, justicia y sanación' – Rendición de cuentas sobre casos de abuso y ambientes seguros», que recoge los pasos dados en la atención a víctimas y el desarrollo de ambientes seguros: https://t.co/32W62LRAF4 pic.twitter.com/LeJ0bb2Azb
— Legionarios de Cristo (@LegiondeCristo) March 22, 2021
Los que aparecen en la lista son identificados con nombre y apellidos o con códigos numéricos (dependiendo de la legislación de cada país) en la página 0abusos.org y la información se irá actualizando.
Los Legionarios de Cristo consideran que la publicación de los casos de abuso da a las víctimas «conocidas y desconocidas» el «reconocimiento objetivo del abuso que puede facilitar el camino de sanación» y «anima a otras posibles víctimas» a buscar apoyo.
Además deja claro que el sacerdote en cuestión, apartado de la Iglesia o condenado, «ya no ejerce ministerio sacerdotal público alguno, liberando a las víctimas de la preocupación de que los abusos se puedan repetir», señala el documento.
En 2020 la congregación ha ayudado económicamente a las víctimas que pedían terapias para superar sus abusos y ha impulsado una colaboración internacional con la asociación contra el abuso sexual en la Iglesia Católica, «Eshmá».
Los próximos pasos de este proceso de sanación de los Legionarios de Cristo en 2021 serán «reforzar la atención y escucha profesional y sistemática a las víctimas», así como «establecer un programa independiente para la reparación económica de las víctimas».
Otra prioridad será «examinar los posibles casos de encubrimiento y negligencia grave».