(Katolische/InfoCatólica) En una entrevista con el portal de Internet «Kirche-und-Leben.de», el vicario general de Münster, P. Klaus Winterkamp, anunció que se va a establecer en la diócesis el cargo de director administrativo.
«Esta persona se encargará de toda el área administrativa-económica», dijo Winterkamp. Además, el nuevo jefe de administración será el supervisor de todos los empleados «mientras no estén en servicio pastoral y mientras las tareas no requieran la revisión del superior (ndr: el Vicario general)».
El propio Winterkamp, de 54 años de edad, seguirá siendo vicario general, cargo que desempeña desde octubre de 2018. Se ocupará principalmente de los asuntos pastorales-estructurales de la gestión de la diócesis.
El sacerdote destacó que también ve el nombramiento de un director administrativo como una señal de política eclesiástica. Fue el deseo expreso del obispo Félix Genn y de él mismo el dar ese cargo a un seglar: «El obispo y yo estamos dispuestos a entregar la influencia, la responsabilidad y el poder en las manos competentes de los laicos que tienen más experiencia en estas áreas que nosotros». Una estructura similar a la planeada en Münster ya existe en la Archidiócesis de Munich y Freising, entre otras.
Winterkamp subrayó además que la «forma muy centralizada de administración con su orientación extrema hacia el Vicario General» ya no es adecuada para las necesidades de una Iglesia cada vez más plural, así como para los desafíos económico-financieros. Aunque la Oficina del Vicario General estaba haciendo un buen trabajo, «podíamos, sin embargo, ser más rápidos, más profesionales y más eficientes en algunas áreas», dijo el Vicario General. Más allá del establecimiento del nuevo cargo, debemos ver si nuestras estructuras departamentales realmente corresponden a las necesidades.