(Actuall/InfoCatólica) Un hombre a quien llamaremos Omar (nombre ficticio) lleva tres meses en prisión en Egipto, por haber sido acusado de compartir en Facebook información sobre el cristianismo que insultaba al islam.
El juez se niega a liberarlo por temor a las manifestaciones y a un posible linchamiento.
Kelsey Zorzi, directora de defensa de la libertad religiosa global de ADF International pide al gobierno que garantice su liberación: «Nadie debe ser perseguido por su fe. Las leyes sobre blasfemia violan directamente el derecho internacional. Todas las personas tienen derecho a elegir libremente y vivir su fe. Tener la libertad de compartir su fe en las redes sociales es parte del derecho a la libertad de religión. No solo se violan los derechos fundamentales de Omar, sino que su vida también corre peligro simplemente por su fe. Instamos a todos los gobiernos a que cesen la persecución de los cristianos mediante la aplicación de sus leyes contra la blasfemia y garanticen la protección de sus derechos a la libertad de religión y expresión.
Omar ha sido sometido a múltiples audiencias judiciales y en cada una su encarcelamiento fue ampliado. Su familia está siendo acosada por las turbas enardecidas.
En Egipto son frecuentes los secuestros de mujeres y niñas cristianas, quienes son forzadas a casarse con sus captores. Las autoridades no hacen mayor esfuerzo por evitar las persecuciones a las minorías religiosas.
Cualquier acto que consideren instigante contra el islam es penado con la cárcel.
Esto sucede en varios países del Medio oriente y África del Norte debido a las restricciones religiosas que imponen los gobiernos.
El señor Paul Coleman es el director ejecutivo de ADF International, entidad encargada de la defensa de Omar, dijo que «las minorías religiosas, y los cristianos en particular, enfrentan una persecución generalizada y severa. Nadie debería hacer la vista gorda ante la difícil situación que afrontan los cristianos en Egipto y en muchos otros países del mundo, todos los días».