(InfoCatólica) El presidente ecuatoriano ejerció su prerrogativa de veto después de que la Asamblea Nacional aprobara el código por mayoría con solo ocho legisladores en contra.
El COS abría las puertas al aborto, los vientres de alquiler y la enseñanza de la ideología de género en la escuela. Ello provocó que en las calles se diera una movilización civil para exigir el veto. Hubo manifestaciones frente a la sede de Gobierno, el Palacio de Carondelet, y desde redes sociales.
Según el ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos, «No existió rigor científico ni clínico en la construcción de la norma. El veto total al Código Orgánico de la Salud responde a un imperativo social. Debemos de emprender un nuevo proceso, más incluyente, más técnico, más basado en evidencia científica».
En plena crisis sanitaria por causa del COVID-19, Zevallos destacó que una de las fallas del COS es que no tenía ningún articulado sobre cómo actuar ante una pandemia como la actual.
Aunque desde la secretaría jurídica de Presidencia se indicó que la medida adoptada por Moreno viene dada por cuestiones técnicas y no religiosas, los grupos provida ecuatorianos han celebrado con júbilo el veto presidencial. Uno de los legisladores que votó en contra del COS y pidió la intervención de Lenín Moreno, mostró su satisfacción en Twitter:
Una buena noticia: ¡Veto TOTAL al COS! #VetoCOS pic.twitter.com/fHrz6dWciP
— Esteban Torres Cobo (@etorrescobo) September 25, 2020
El arzobispo de Quito, Mons. Alfredo Espinosa, quien criticó contundentemente el intento de colar el aborto y la ideología de género por la puerta de atras, manifestó su alegría por el veto presidencial: «Desde un primer momento dijimos que ese código era un código de muerte y hoy decimos con alegría que la vida ha triunfado»
Declaración completa de Mons. Espinosa