(CNA) Durante su período de arresto domiciliario, el obispo Cui ha sido detenido periódicamente y luego liberado por las autoridades de la provincia de Heibei. La última puesta en libertad vigilada fue en enero de este año y, según se informa, fue arrestado nuevamente el 19 de junio.
Cui fue ordenado obispo en 2013 y desde entonces ha servido como coadjutor del obispo Thomas Zhao Duomo de Xuanhua, que tiene 96 años de edad. Según un informe de 2019 de AsiaNews, Cui ha sido detenido repetidamente, y ha pasado períodos en campos de trabajos forzados, por participar en actividades de evangelización sin autorización del gobierno. También ha hablado en contra de la Asociación Patriótica fiel a la dictadura, asegurando que es una Iglesia «independiente» de la Santa Sede.
La noticia del arresto del obispo Cui llega cuando el acuerdo Vaticano-China de 2018 sobre la ordenación de obispos expira en septiembre. El Vaticano, según se dijo, esperaba que el acuerdo ayudara a unificar la Iglesia Católica clandestina en China, que había permanecido en plena comunión con la Santa Sede, y la Asociación Patriótica Católica China, patrocinada por el Estado.
Tras el acuerdo, y en línea con el programa de «sinización» del gobierno comunista, los funcionarios estatales de diferentes regiones del país han continuado quitando cruces y demoliendo edificios de iglesias, y los católicos y el clero clandestino siguen informando de acosos y detenciones.