(Asia News) En varias áreas de Indonesia la población local se niega a que las víctimas del Covid-19 sean sepultadas en los cementerios del lugar. La sociedad civil de país denuncia que estas situaciones se están repitiendo en Gowa (Célebes del Sur), Bandung (Java Occidental) y en el distrito de Semarang.
Millones de internautas indonesios, al igual que las autoridades locales, manifestaron su indignación frente a estos gestos. Afirman que muchos indonesios muestran escasa humanidad y una absoluta falta de compasión por las personas que han sacrificado su vida para ayudar a otros.
La enfermera de Sewakul finalmente fue sepultada en el área del hospital donde trabajaba. El jefe del pueblo declaró que recibió presiones para impedir el funeral. La policía está investigando el caso, en busca de los tres «agitadores» que habrían instigado a otras 10 personas a bloquear el ingreso al cementerio.
Condenando lo sucedido, la Asociación Nacional de Enfermeras pidió al gobierno prestar mayor atención al personal médico en los hospitales, ya que no cuentan con los elementos de protección necesarios y se ve obligado hacer largos turnos de trabajo. Al 13 de abril, en el país hay 22 médicos y 10 enfermeras muertos por el coronavirus. En total, el número de infectados ya supera 5.000; 468, los muertos: es la tasa de mortalidad más alta de Asia, después de China. Los pacientes recuperados suman cerca de 430.
A causa de la pandemia, la situación social se está deteriorando. La policía de Yakarta dio a conocer que podría haber saqueos masivos y acciones vandálicas el próximo 18 de abril. La acción está siendo organizada por la Anarko Gang, con una campaña de apoyo en la web. La cuarentena impuesta por las autoridades ha reducido al hambre a muchas personas en todo el país, y las más afectadas son las personas de bajos ingresos.