(Fides/infoCatólica) La presencia de los Franciscanos Conventuales en Venezuela se remonta a 1978, cuando los primeros 3 misioneros partieron de Italia para ir a Guanare. Desde los primeros años los religiosos acompañaron la actividad pastoral en la parroquia de San José Obrero con iniciativas asistenciales dirigidas sobre todo a los vagabundos y familias pobres de los barrios, zonas sobrepobladas de las grandes ciudades. El Obispo de Caracas les sugirió trabajar inicialmente en Lidice-Manicomio, donde fue abierta una escuela parroquial. En 1991, la Parroquia de San Juan respondió al vertiginoso aumento de pobres dotándose de una Casa de acogida y auxilio médico.
La obra inició con pocos recursos en un terreno edificable y acogió s los primeros vagabundos gracias al trabajo de los misioneros, hoy seguidos por un grupo de voluntarios de la Orden Franciscana Secular (OFS). El Proyecto Alejandro, también este dirigido por un grupo OFS está dirigido a los niños del barrio. Son niños que han dejado el colegio y viven por la calle, expuestos a todo tipo de riesgos (robo, droga, prostitución). La implantatio Ordinis se ha caracterizado por una rápida respuesta vocacional. Hoy el corazón de la misión es Palmira, un municipio a 10 km de San Cristóbal, donde tiene sede el seminario diocesano y el seminario San José de Copertino, fundado para responder a la demanda de los jóvenes venezolanos dispuestos a compartir el ideal franciscano.
