(InfoCatólica) Mons. Georg Bätzing, obispo de Limburgo, dijo en su mensaje por el Año Nuevo, que «debo tomarme en serio como obispo que la exclusión de las mujeres de la ordenación se percibe fundamentalmente como injusta e inapropiada en un entorno social que desde hace mucho tiempo ha equiparado a las mujeres y los hombres en sus derechos».
Por su parte, Mons. Josef Overbeck, obispo de Essen, durante su homilía en la primera Misa del año instó a la Iglesia a no cerrarse a una mayor participación de las mujeres en el ministerio, y «a no solidificar permanentemente los muros de hoy con los que se niega a las mujeres compartir la responsabilidad» en el liderazgo eclesial. Mons. Overbeck ya dijo a primeros de diciembre que podía imaginarse a las mujeres como sacerdotes.
La doctrina de la Iglesia sobre el tema
En el mes de mayo del año 2018, el cardenal Luis Ladaria, Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, recordó en un artículo publicado en L´Osservatore Romano el carácter definitivo de la doctrina católica sobre el sacramento del orden sacerdotal reservado para los hombres.
Escribió entonces el cardenal español:
La Iglesia siempre se ha sentido obligada por esta decisión del Señor, que excluye que el sacerdocio ministerial pueda conferirse válidamente a las mujeres. Juan Pablo II, en su carta apostólica Ordinatio sacerdotalis, publicada el 22 de mayo de 1994, enseñó «con el fin de alejar toda duda sobre una cuestión de gran importancia» y «en virtud de mi ministerio de confirmar en la fe a los hermanos» (cf. Lc 22,32), que «la Iglesia no tiene en modo alguno la facultad de conferir la ordenación sacerdotal a las mujeres, y que este dictamen debe ser considerado como definitivo por todos los fieles de la Iglesia».
La Congregación para la Doctrina de la Fe, en respuesta a una duda sobre la enseñanza de la Ordinatio sacerdotalis, reiteró que es una verdad que pertenece al depósito de la fe.
Desde este punto de vista, es motivo de grave preocupación que aún se escuchen voces en algunos países que cuestionan la validez de esta doctrina. Para sostener que esto no es definitivo, se argumenta que no se ha definido ex cathedra y que una decisión posterior de un futuro Papa o Concilio podría, por lo tanto, revocarla. Sembrar estas dudas causa una gran confusión entre los fieles, no solo acerca del sacramento del Orden Sagrado como parte de la constitución divina de la Iglesia, sino también acerca del Magisterio ordinario, que puede enseñar infaliblemente la doctrina católica.