Hace 21 años la prueba del Carbono 14 sentenció que la Sábana Santa, el lienzo que según la tradición envolvió el cuerpo de Jesús, luego de morir en la cruz, es una falsificación realizada alrededor del año 1260.
En su libro Tossati habla de nuevas contribuciones de la ciencia en la investigación de este lienzo y presenta nuevas pruebas de científicos de la Universidad de la Sapienza en Roma, que nunca antes habían investigado sobre el Sudario. Los científicos comprueban el error de la investigación realizada en 1988.
Según el vaticanista, los resultados de los tres laboratorios no tenían el margen mínimo de compatibilidad establecido y el análisis lo realizaron sobre un pedazo de ocho centímetros de la sábana.
En dicho pedazo se encuentra la presencia de algodón --la sábana es de lino-- y una especie de goma que lleva a pensar que el sudario fue remendado en la edad media. Basándose en ese supuestamente se "demuestra" que la sábana fue fabricada en la Edad Media.
"Este libro está basado solamente en datos científicos. He descartado el material que no tiene estas características para establecer un mínimo común denominador de conocimientos sobre la Sábana Santa que no se pueden desmentir", explica Marco Tosatti a la agencia Zenit.
"Este era el objetivo del libro porque yo mismo quería una base de certeza y sobre esta base pienso que puedo decir que la Sábana Santa no es una reproducción falsa", agrega el autor del libro.
Después de investigar con diversos científicos de diferentes credos --judíos, metodistas e incluso agnósticos-- y que confirman la falsedad de esta investigación, Tosatti, vaticanista de La Stampa, demuestra que la ciencia todavía no ha podido explicar cómo se ha formado la imagen.
Asegura que con ningún aparato se ha podido crear un objeto similar: "No es una pintura, no hay ningún pigmento y no ha sido marcada por un objeto caliente", testimonia el periodista.
"Es un misterio, uno de los grandes misterios de la Iglesia, la manera en que se ha formado este tipo de imagen. Contiene información tridimensional, algo sumamente particular", indica.
El Sudario se encuentra en la catedral de la ciudad de Turín, al norte de Italia. En los años 1998 y 2000 fue exhibida al público. El próximo año será expuesta de nuevo desde el 10 de abril hasta el 23 de mayo.
Según Tosatti, uno de los elementos más admirables de la Sábana Santa es cómo representa el rostro de Jesús. "Si uno lo analiza, es un rostro de una belleza y de características tales como yo no he visto en ninguna pintura", afirma.
El periodista e investigador considera que este lienzo es una pieza muy poco valorada por los católicos: "Creo que nosotros nos asustamos un poco con este objeto tan evidente porque ha habido mucha polémica sobre las reliquias en los siglos anteriores, entre protestantes, católicos, racionalistas, entre otros y pareciera casi que si uno cree que una reliquia es verdadera, esto viene del medioevo".
"Para mí no hay dudas. Todavía hoy con toda nuestra tecnología no estamos en grado de hacer algo análogo. La ciencia nos puede ayudar a decir qué cosa es. Seguramente no es falso", concluye Tosatti.