(EP/InfoCatolica) La entrevista, que todavía tiene que ser confirmada oficialmente por la Casa Blanca, tendrá lugar al término de la reunión anual de los países del G-8, que se celebrará en la ciudad de L'Aquila (centro de Italia) entre los próximos 8 y 10 de julio.
Según el protocolo vaticano, no es habitual que el Papa reciba a los jefes de Estado o de Gobierno por la tarde. Sin embargo, en esta ocasión, el Pontífice se ha mostrado disponible a ello para responder a las necesidades del presidente norteamericano, que tiene previsto iniciar una visita oficial a Ghana en cuanto termine el G-8.
Entre los temas que podrían abordar destacan los principales conflictos internacionales, con especial atención a la situación en Oriente Medio e Irán, la crisis económica y las problemáticas relacionadas con la bioética, tales como el aborto o la investigación con células embrionarias, aspectos sobre los que la Administración Obama y el Vaticano mantienen posiciones opuestas.