(AsiaNews) El próximo 20 de agosto se inaugurará en Moscú el primer centro privado gratuito de rehabilitación para adictos, organizado por la Iglesia Ortodoxa en la iglesia de la S.S. Trinidad vivificante en Kozhevniki, un barrio central cerca de la estación de los trenes «Paveletskaja». La noticia fue difundida por el Departamento Sinodal para la caridad del Patriarcado de Moscú.
Podrán ser asistidas hasta 15 personas contemporáneamente, ya sea hombre o mujer, y quien sea escogido podrá luego, si es necesario, ser enviado a uno de los centros regionales para la rehabilitación sedentaria, como lo precisó el Departamento. Las actividades sin fines de lucro y de beneficencia de hecho están prohibidas en Rusia desde hace diversos años, habiendo sido a menudo sospecha injerencista de la fe extranjera, mientras que toda forma de asistencia está asegurada por el estado, como en los tiempos soviéticos. La nueva comunidad de recuperación abre por lo tanto un nuevo capítulo en el campo de las acciones humanitarias, gracias a la Iglesia Ortodoxa.
El obispo Panteleimon (Shatov) de Orekhovo-Zuevo, jefe del Departamento para la caridad, recordó que «muchos consideran que la ayuda a los adictos no es una prioridad y que ellos deben resolver de por sí sus propios problemas. En realidad los drogados son realmente unos necesitados, no menos de todas las otras personas terminadas en la miseria. La Iglesia está lista para recibirlos a todos, a condición que la persona desee corregir su propia vida y a derrotar la dependencia. Las puertas de nuestro nuevo centro estarán abiertas a todos, independientemente de la condición religiosa, de la edad o de la ciudadanía».
El centro está organizado gracias a la ayuda de Centro de Beneficencia «S. Juan de Kronshtadt», sobre la base del fondo presidencial para el apoyo a las obras sociales. Hoy en Rusia se cuentan casi 500.000 adictos, según las estadísticas del Ministerio del Interior. Oficialmente hay abiertos 70 centros de rehabilitación, además de 60 consultorios y 18 centros de re-socialización. Cada año la Iglesia Ortodoxa abre no menos de 10 nuevas estructuras de apoyo para la recuperación de los adictos.
