(ACdP Jerez) La cuestión educativa en España se ha caracterizado en los últimos años por moverse al rebufo de las agitadas aguas de la política, motivado por el análisis que se ha hecho, y se sigue haciendo, de los problemas propios de la educación desde el campo de la ideología dejando a un lado las ideas y propuestas de los profesionales, quienes por su dedicación y experiencia estaban, y están, más capacitados para ofrecer un futuro prometedor al problema educativo.
Hemos de asumir que todo lo que rodea a la educación es un asunto complejo, al intervenir diversos derechos y libertades fundamentales: derecho a la educación, libertad de enseñanza, derecho de los padres a elegir la formación moral y religiosa que han de recibir sus hijos, libertad de creación de centros o el principio de ayuda de las administraciones públicas a los centros docentes que reúnan los requisitos establecidos por la ley. Pero que sea complejo no quiere decir que sea infranqueable, y precisamente por las difi cultades que comporta exige primero un pacto nacional y segundo el respeto a los derechos y libertades señaladas.
La Asociación Católica de Propagandistas, en recientes palabras de su presidente, ha manifestado que «en la libertad de educación es donde una sociedad se juega su condición de sociedad libre». En este sentido, la Asociación, implicada en la cuestión educativa a través de su obra principal, el Centro de Estudios Universitarios (CEU), que cuenta con 23 centros docentes en diferentes ciudades de España, ha decidido asumir el reto de impulsar el reconocimiento del valor de la libertad de educación entre la opinión pública española, con objeto de contrarrestar el pensamiento social de ciertas ideologías basadas en la idea de «monopolio estatal» de la enseñanza.
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