(Agencias/InfoCatólica) El fiscal general de Colorado Phil Weiser y el abogado que representa a Jack Phillips dijeron que el caso no llegará a los tribunales. El estado pretendía que se juzgara al repostero por discriminación mientras que él demandó al estado por atentar contra su libertad religiosa.
Los abogados de Phillips calificaron el acuerdo como una victoria para el repostero. Weiser, demócrata, dijo que ambas partes «coincidieron en que no interesaba a nadie seguir adelante con este tipo de casos».
Un portavoz de la Alliance Defending Freedom ha declarado que confían «que el estado haya terminado con sus obvios esfuerzos de acosar a Jack. No debe ser expulsado del negocio solo porque algunas personas no están de acuerdo con sus creencias religiosas y su deseo de vivir de manera coherente con ellas».