(InfoCatólica) La comisión de Justicia de la Asamblea propone que se despenalice el aborto en casos de violación, incesto y malformaciones en el feto. El aborto está actualmente permitido en Ecuador si el embarazo pone en riesgo la vida de la madre o si es resultado de la violación a una mujer con discapacidad mental.
Comunicado del consejo de presidencia de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana
El 19 de diciembre del 2018, la Comisión de Justicia y Estructura del Estado aprobó el Informe para el primer debate de la Ley Orgánica Reformatoria al Código Orgánico Integral Penal.
Los temas propuestos son: las normas anticorrupción y la recuperación de capitales mal habidos; la despenalización del «aborto en casos de violación, malformaciones del feto que hagan inviable su vida, estupro, incesto e inseminación no consentida», la incorporación de «infracciones y sanciones al maltrato, lesiones, abandono y abuso sexual a mascotas o animales de compañía», como también el control de la «venta de fármacos falsificados o caducados, uso terapéutico del cannabis y procedimiento penal expedito y unificado para casos de violencia de género».
El informe indica que se trata de una oportunidad para que estos temas de «alta sensibilidad» sean ampliamente debatidos por el Pleno de la Asamblea Nacional y por la sociedad en general. Como sociedad tenemos el derecho y la obligación de conocerlos, reflexionarlos y debatirlos. Las organizaciones sociales, políticas, económicas y religiosas, entre otras, por tanto, debemos asumir esta tarea histórica con decisión y responsabilidad, sin permanecer al margen como simples espectadores pasivos o indiferentes.
Como ciudadanos y pastores del pueblo de Dios invitamos a todos los hombres y mujeres de buena voluntad, a las familias y, de una manera especial, a los asambleístas a exponer con claridad y valentía sus argumentos científicos, éticos y jurídicos, libres de toda posición fundamentalista, ya sea de carácter social, político o religioso. La vida humana está por encima de toda bandera política y religiosa o de posiciones erróneamente calificadas como conservadoras o progresistas.
Como un aporte para el debate, hemos elaborado un documento, con el asesoramiento de connotados profesionales en los campos: médico, ético y jurídico, referido, de una manera particular, a los derechos de los niños por nacer, y que está a su libre disposición en la web: www.conferenciaepiscopal.ec.
En consonancia con todos los hombres y mujeres que aman y defienden la vida en todas sus dimensiones, como Iglesia Católica, por fidelidad a Dios Creador y a su Hijo Jesucristo, nos sentimos responsables de velar por la dimensión ética de la vida humana, particularmente de su dignidad y libertad. Sin ética, la ciencia médica se transforma en crueldad; la ley, en tiranía; la política, en corrupción; y la religión, en condenación rigorista e inmisericorde.
Que en este nuevo año renovemos una vez más nuestro firme compromiso de amar y defender la vida humana en todas sus fases.