(Agencias/InfoCatólica) El arzobispo indicó que así como se exige que a los migrantes mexicanos se les trate bien en Estados Unidos, así también se debe tratar bien en México a los migrantes centroamericanos.
«Generalmente no los atendemos muy bien ni nosotros ni las autoridades porque los vemos más negritos sandía que nosotros y los albergues no son suficientes para atenderlos, además sabemos que hay mucho abuso de la autoridad y nada hacemos contra eso».
En cuanto a los protestantes evangélicos y miembros de otras religiones, indicó:
«Podemos decir que todo el que anuncia a Jesucristo está haciendo la misma tarea, la misma misión que los católicos.. Yo tengo mas preocupación por los que no creen en nada. Si los hermanos evangélicos, por ejemplo, están anunciando a Jesucristo y las personas se convierten y cambian su vida ¡qué bueno!, ¡Bendito sea Dios que están logrando eso y no que sean gente lejana, distante, o católicos que nunca se presentan a misa, sino que empiecen a creer más en Dios! No podemos considerar a los evangélicos o a los hermanos de otras religiones como enemigos, más bien están colaborando en la obra de Dios a su modo».
Y sobre la comunidad LGTBI, dijo:
«Sabemos que son personas a las que tenemos que reconocer porque la dignidad de la persona es para todo hombre y mujer cualquiera que sea su tendencia, tenemos que respetar la dignidad humana; si somos católicos y creyentes hay que respetar que son hijos de Dios, tenemos que reconocerlos como hermanos y si no son creyentes por lo menos que tengan un código de conducta»