(InfoCatólica) El cardenal Sgreccia asegura en una entrevista que lo que está ocurriendo «es un ataque a la institución familiar. Todo se deriva del estatalismo, que se presenta en forma humanizada. Hace temblar a uno cuando recuerda lo que han hecho en los regímenes totalitarios»
Y añade que es un estataliismo que decide como si fuera un imperio «cerrar el acceso a los alimentos y negar los cuidados paliativos a un niño enfermo. Parece que no nos avergonzamos de eso».
Preguntado si se puede detener este proceso, responde:
«Puede detenerse reafirmando los valores. ¿Cómo? Con educación, que hoy ha desaparecido. En la escuela, por ejemplo, el término educación ha sido reemplazado por el de instrucción. No es lo mismo. Durante el fascismo, la educación en las escuelas estaba sujeta al régimen. Hoy se está llevando a cabo el mismo proceso, pero está amparado por la legalidad. Necesitamos educar a los jóvenes, por ejemplo, para decir 'no' a este estatalismo, al pensamiento relativista que parece ser dominante»
«¿Hay esperanza?», le preguntan:
«La esperanza siempre está ahí, siempre y cuando exista la voluntad. Noto que en la sociedad ha habido cambios en los últimos tiempos, hay un movimiento de intolerancia hacia ciertas decisiones tomadas desde arriba, en detrimento de los más débiles. Los actores reales en la historia son las personas, que viven los problemas en su piel, no debemos olvidarlos. El cristianismo ofrece todos los recursos para detener este cambio sutil hacia una dictadura. Solo queda redescubrirlos».
Con información de In Terris