(Agencias/InfoCatólica) Según explica un fotógrafo de Reuters, la mujer saltó por encima de las vallas de seguridad y se apresuró a coger la estatua del pesebre, mientras gritaba «Dios es mujer», mismo eslogan que tenía pintado en su espalda.
Un guardia la frenó y acabó detenida. El incidente se dio unas dos horas antes de que el papa Francisco se dirigiera a las 50.000 personas que se encontraban en la Plaza para escuchar el mensaje de Navidad.