(InfoCatólica) El Papa Francisco cree que «ha llegado la hora» de atender las necesidades pastorales de los católicos sirio-malabares en la India que han estado viviendo fuera de su territorio, lo que supone la culminación de un proceso iniciado por Benedicto XVI en 2011.
En una carta dirigida a los obispos indios, el Papa autorizó a la Congregación para las Iglesias Orientales a erigir dos nuevas eparquías para extender el alcance de las ya existentes: Ramanathapuram y Thuckalay, que son pastoreadas por el arzobispo de Ernakulam-Angamaly, Mar George Alencherry, y el Sínodo de los Obispos de la Iglesia Syro-Malabar.
Las dos nuevas eparquías son Shamshabad y Hosur, que serán gobernadas respectivamente por el obispo Raphael Thattil y el obispo Sebastian Pozholiparampil.
Tres ritos
La Iglesia Católica en la India está compuesta por tres iglesias independientes 'sui iuris': una de rito latino y dos de ritos orientales, siro-malabar y siro-malankar, que fueron fundadas por Santo Tomás Apóstol, del que se cree que evangelizó la India.
En la carta del 9 de octubre, el Papa subrayó que el futuro de la Iglesia Católica en la India no puede ser «el del aislamiento y la separación, sino más bien el del respeto y la cooperación», y añadió que la colaboración entre los diversos ritos católicos en los territorios «seguramente ofrecerá un elocuente testimonio de una vibrante y maravillosa comunión».
El Papa subrayó que tal disposición no debe perturbar la vida de la Iglesia ni ser vista como un requisito para que los fieles abandonen las comunidades donde han vivido y han cooperado pacíficamente durante muchos años.
«Más bien debe ser visto como una invitación, así como una oportunidad para el crecimiento en la fe y la comunión» con la Iglesia siro-malabar - dijo el Papa - «para preservar el precioso patrimonio de su rito y transmitirlo al futuro generaciones».
Con información de Crux