(Agencia Fides/InfoCatólica) Las familias de los 21 coptos que fueron asesinados en Libia en 2015 por los yihadistas afiliados al Estado islámico (Daesh) han dirigido al Ministerio de Relaciones Exteriores egipcio una solicitud urgente para que confirme el hallazgo de los restos de sus familiares, anunciado el 28 de septiembre por el fiscal general libio Sadiq al Sour.
En el mensaje, emitido por los medios de comunicación locales, los familiares de las víctimas de la masacre expresan el temor de que alguien pueda jugar con los sentimientos más íntimos de las personas con la única intención de lanzar anuncios de efecto y atraer la atención de los medios de comunicación, mortificando los deseos de los familiares de las víctimas de poder enterrar y honrar a sus seres queridos de una manera digna.
El 28 de septiembre, el fiscal de Libia Al Sadiq, durante una conferencia de prensa, anunció el descubrimiento del lugar donde fueron enterrados los restos de los 21 cristianos coptos que los yihadistas habían degollado en febrero de 2015. Desde ese momento, - se lee en el apelo de los miembros de la familia de los mártires al gobierno - «todos comenzaron a orar, pidiendo que los cuerpos de los mártires pudieran regresar pronto a Egipto y a su Iglesia, y convertirse en una bendición para todo el país».Pero desde entonces, las autoridades de Libia y Egipto no han dado ninguna indicación de la constatación anunciada. Los medios de comunicación de los dos países han comenzado a difundir unas suposiciones y discursos contradictorios, entre ellos algunos que de hecho han negado el anuncio dado por el fiscal libio en una conferencia de prensa. Los miembros de la familia de los mártires, en su apelación, expresan la sospecha de ver sus sentimientos más profundos ofendidos por juegos políticos oscuros y despiadados.
En febrero de 2015, la masacre egipcia fue reclamada por los yihadistas con la propagación de un vídeo macabro que retrataba las etapas de la decapitación colectiva. Apenas una semana después de su encarcelamiento bárbaro, el patriarca católico ortodoxo Tawadros II decidió escribir a los 21 mártires degollados por el autoproclamado estado islámico en Libia, en la lista del Synaxarium, el libro de los mártires de la Iglesia Copta, estableciendo que su memoria fuese celebrada el 15 de febrero.