(Actuall/InfoCatólica) A partir del 1 de octubre las parejas homosexuales de Alemania podrán casarse y adoptar niños, según el Boletín Oficial del Estado publicado este viernes, que recoge la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo que ha aprobado el Parlamento.
El Ministerio de Interior ha indicado que aquellas parejas que lo deseen ya pueden solicitar en el Registro Civil una fecha, posterior al 1 de octubre, para contraer matrimonio, tal y como lo señala Europa Press.
Según ha podido saber la agencia de noticias DPA, Interior ha aclarado a los gobiernos regionales que las parejas de hecho que quieran cambiar su estado civil a «casados» también podrán pedir cita a partir de dicho día.
Las uniones civiles ya estaban aprobadas
En 2001, Alemania permitió las uniones civiles entre personas del mismo sexo, pero con un régimen distinto al del matrimonio, por lo que les restringía algunos derechos como la adopción de niños en pareja.
Con la legalización del matrimonio homosexual, la figura jurídica de la unión civil desaparecerá pero las parejas que quieran mantener este estatus podrán hacerlo.
El 30 de junio la cámara baja del Parlamento, el Bundestag, aprobó la ley del matrimonio homosexual y el 7 de julio la cámara alta, el Bundesrat, la ratificó, quedando así completado el trámite normativo.
Merkel, clave para la legislación
La legalización fue posible porque la canciller alemana, Angela Merkel, que siempre se había opuesto al matrimonio homosexual, decidió dar libertad de voto a los parlamentarios de la Unión Cristiano Demócrata (CDU).
El Partido Social Demócrata (SPD), que gobierna como socio minoritario junto a la CDU, advirtió, junto a otras formaciones opositoras, de que no volvería a pactar con la CDU para formar gobierno si no se legalizaba el matrimonio homosexual.
Alemania celebrará elecciones federales el próximo 24 de septiembre y, aunque los sondeos sobre intención de voto sitúan a la CDU como favorita, lo más probable es que no gane con el margen suficiente para gobernar en solitario, lo que obligará a Merkel a buscar socios.