(Germinans Germinabit/InfoCatólica) Generalitat de Cataluña ha archivado el expediente abierto contra el P. Custodio Ballester a raíz de su homilia del 24 de junio criticando el día del orgullo gay. Sus consideraciones morales sobre la homosexualidad se enmarcan, según la Dirección General de Asuntos Sociales y Familia, dentro del legítimo ejercicio de la libertad de expresión y de opinión.
El P. Custodio ha abierto con su valerosa actitud un camino en las turbulentas aguas de este Mar Rojo de pensamiento único y de amedrantamiento de la discrepancia. Esperamos que muchos otros pastores transiten por él. La Verdad os hará libres.
Así lo ha explicitado en una nota el Area para la Igualdad de trato y no discriminación de personas LGTBI, de la Dirección General de Igualdad, del Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalitat de Cataluña, en la que puede leerse textualmente:
Este Área inició diligencias de información y actuaciones previas orientadas a determinar los hechos susceptibles de motivar la posible incoación del procedimiento según el artículo 55 de la Ley 39/2015 del 1 de octubre de 2015.
Una vez analizadas las palabras del padre Custodio Ballester se constató que no era posible abrir un procedimiento administrativo sancionador porque no incurría en ninguna infracción administrativa regulada en el artículo 34 de la Ley 11/2014, del 10 de octubre, y que su exposición se situaba en el ámbito del ejercicio del derecho de la libertad de expresión, opinión e ideología de esta persona.
Por tanto, en fecha 12 de julio el Área para la Igualdad de trato y no discriminación de personas LGBT, procedió a cerrar y archivar este expediente.
Contexto de la denuncia
El sacerdote afirmó en una homilía pronunciada en una misa el pasado día 24 de junio que el mundo está «podrido y pervertido» y que si los curas no dicen la verdad, la sociedad acabará pensando que «eso de ser gay está bien, que es guay».
«Sigue siendo pecado ser homosexual por mucho que lo promuevan los poderes públicos», sostuvo en la misa Ballester, quien arremetió contra las leyes antihomofobia porque «llevan hacia una dictadura en la que no se puede discrepar».
El P. Ballester también condenó el aborto, del que dijo que por mucho que sea legal no deja de ser un crimen abomibable.
En la Misa, el sacerdote abordó la celebración del día del orgullo gay, sobre la que dijo que «esta semana los homosexuales mostrarán en Madrid sus vergüenzas públicamente y el fin de semana vendrán a hacerlo también en Barcelona».