(Efe/InfoCatólica) Médico y periodista de formación, en 1984 Navarro-Valls (Cartagena, 1936) se convirtió en el primer laico y el primer no italiano en ocupar el cargo de director de la Sala de Prensa de la Santa Sede.
Durante el pontificado de San Juan Pablo II desarrolló un trabajo fundamental, sobre todo en los últimos meses, cuando la salud del anciano papa polaco estaba muy deteriorada y se encargaba de comunicar con precisión a la prensa las condiciones del pontífice.
Fue el principal artífice de la modernización de la información en la Santa Sede.
Acompañó al papa Juan Pablo II en todos sus viajes y actos oficiales, y como portavoz vaticano confirmó oficialmente la muerte del pontífice en la noche del 2 de abril de 2005. Durante su etapa como director de la Sala de Prensa de la Santa Sede potenció y modernizó la Oficina de Prensa vaticana, que canaliza toda la información sobre la actividad del Pontífice y de los dicasterios de la curia.
El 11 de julio de 2006, después de 22 años como portavoz del Papa dejó la dirección de la Sala de Prensa de la Santa Sede, pocos días después de acompañar a Benedicto XVI en su viaje a Valencia para participar en el Encuentro Mundial de las Familias.
Navarro-Valls se doctoró en Medicina por la Universidad de Granada en 1961, en las especialidades de Psiquiatría y Psicología Social. Más tarde, en 1968, se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra. Desde 1960 hasta 1974 colaboró en diversos periódicos y revistas de España y fue fundador de la revista «Diagonal» en Barcelona.
De 1974 a 1977 fue corresponsal de las revistas «Nuestro tiempo» y «Revista de Medicina», y portavoz del Opus Dei, organización de la que forma parte desde 1959. El 1 de diciembre de ese último año fue nombrado corresponsal del diario madrileño «ABC» para Italia, el Vaticano y los países del Este mediterráneo, con sede en Roma.
Ese cargo lo compaginó en 1983 y 1984 con el de consejero y luego presidente de la Asociación de la Prensa Extranjera en Italia, hasta que el 4 de diciembre de 1984 fue nombrado Director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, debido a una decisión personal del papa Juan Pablo II.
A partir de esta fecha, se convirtió en una de las personas de mayor confianza del papa y su portavoz oficial que le acompañó en todos sus viajes y actos oficiales, incluso durante las cortas vacaciones del pontífice.
Tras abandonar el cargo, debutó en la televisión pública italiana RAI como comentarista, y en enero de 2007 asumió la presidencia del Consejo Asesor de la Universidad Campus Bio-Medico de Roma, centro universitario dependiente del Opus Dei, del que era miembro. Además, desde 2008 empezó a colaborar con la empresa Lux Vide, en la supervisión de mensajes por telefonía móvil con frases históricas de Juan Pablo II, y desde enero de 2009 presidió la Fundación Telecom Italia.
En 1983 fue galardonado por el Rey Juan Carlos I, a petición del Gobierno español, con la Encomienda de la Orden de Mérito Civil y en abril de 1997 se le concedió la Gran Cruz de esta misma orden.
Obtuvo en su carrera premios como el «Líder de Opinión 1980», de la Asociación Internacional de Operadores de Información (OIPEF); premio «Calabria» 1984 para corresponsales en el extranjero; premio «Laurel 1985» y «Laurel Especial 1999» de la Asociación de la Prensa de Murcia o el premio internacional de periodismo «Ischia» en 1985. Era doctor «honoris causa» por la Universidad Cardenal Herrera-CEU de Valencia (2005) y por la Universidad Internacional de Cataluña (2010)