(ABC) La norma deberá llevarse a cabo en la semántica de los escritos de sus servicios administrativos y órganos de dirección. Es el «tercer género», el que -según destaca el gobierno municipal de (Podemos-IU)- permitirá borrar el lenguaje «sexista» y obtener uno que sea «inclusivo y no discriminatorio».
Todo eso se ha plasmado en una «guía de estilo» que ya se ha convertido en directriz básica para todos los órganos y servicios del Ayuntamiento de Zaragoza y que deberán tener en cuenta al redactar los escritos. En no pocos casos, eso forzará a rodeos en las expresiones.
El asunto conllevará también costes, porque se van a elaborar nuevos impresos y solicitudes. Y lo mismo en los directorios y señalíticas municipales. Todos los existentes hasta ahora se están revisando para sustituirlos por este nuevo lenguaje asexual.
La guía ha sido elaborada por la «Oficina de Transversalización de Género», unidad creada en el Ayuntamiento de Zaragoza y adscrita a la concejalía de Educación e Inclusión que dirige Arantza Gracia. Es la misma edil que, en junio del año pasado, disparó la polémica al hacer un llamamiento público por las redes sociales para recaudar fondos en beneficio del joven que agredió al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, cuando paseaba por las calles de Pontevedra. Tras conocerse la sentencia que condenó a este joven, menor de edad, por haberla emprendido a puñetazos contra el presidente del Gobierno y líder del PP, la edil zaragozana Arantza Gracia colgó inmediatamente un mensaje en su cuenta de Twitter llamando a recaudar fondos en beneficio del agresor, que fue condenado a dos años de internamiento y a otro más de libertad vigilada.
Por «tercer género» se entiende al ciudadano que no se considera ni hombre ni mujer -argumenta el gobierno municipal de Zaragoza-. Por eso, considera que no basta con expresiones tales como las manidas «los y las» en una misma frase, o «ciudadanos y ciudadanos». Eso, en sí mismo, se entiende desde el gobierno municipal de Zaragoza que es discriminatorio, porque «excluye» a los que no se consideran ni hombres ni mujeres.
Por eso, la nueva «guía de estilo» para el lenguaje oficial del Ayuntamiento zaragozano se ha concebido «para visibilizar e integrar a aquellas personas que no se sienten identificadas con los géneros tradicionales masculino-femenino: transexuales, transgénero o intersexuales».
Así, dicen desde la concejalía de Arantza Gracia, se logra «la inclusión de género no binarios». Esa «guía de estilo» va dirigida a todo el personal municipal, incluye instrucciones tanto para la documentación externa como la interna, «para hacer un uso inclusivo y no sexista del lenguaje, que no desvalorice, discrimine ni excluya a ninguna persona por razón de sexo, género u orientación sexual».
Dicen desde el gobierno que encabeza el alcalde Pedro Santisteve que, así se cumple con una «reclamación histórica del movimiento feminista de la ciudad» y que se logrará «hacer un uso inclusivo y no sexista del lenguaje, que no desvalorice, discrimine ni excluya a ninguna persona por razón de sexo, género u orientación sexual».