(La Voz de Galicia) El expolio contra el patrimonio eclesiástico se ha convertido en los últimos años en el blanco perfecto de los delincuentes. Solo en el 2013 se registraron una docena de hechos delictivos contra iglesias, capillas o rectorales de la zona. En lo que va de 2017 se han disparado el número de hechos, pero en la Guardia Civil admiten que es muy complicado recuperar todos estos objetos debido a que no se denuncian los robos.
En el instituto armado recuerdan que algunos de los elementos robados tienen un gran valor económico y cultural. Recuerdan la sustracción de una talla policromada del siglo XVII en la capilla de Monte Torán, en Vimianzo, y otros artículos de gran valor así como dinero de los donativos.
De hecho, todas las sustracciones de las que constan denuncias en la Guardia Civil son de fuera de la comarca: A Pastoriza (Arteixo), Santiago de Arteixo, Cambre, Porto do Son, Oza-Cesuras y Mugardos son los casos contabilizados en lo que va de 2017. Miles de euros robados entre piezas de orfebrería y dinero en metálico.