(Aica) Asimismo, recordó que la Compañía de María para la Educación de Niños Sordos es una congregación religiosa de Derecho Pontificio, y que el cambio de destino de sus miembros es decidido por sus propios superiores religiosos.
El prelado hizo este nuevo pedido a raíz de las denuncias por abusos sexuales perpetrados en el Instituto Antonio Próvolo, de la localidad mendocina de Luján de cuya, en cuya causa hay dos sacerdotes detenidos -uno de ellos con denuncias por delitos similares ocurridos en Verona, Italia- y tres empleados de la institución.
Texto de la declaración
«En mi declaración del 7 de diciembre pasado sobre el penoso caso de los sacerdotes acusados del abominable delito de abuso a menores, solicitaba a quienes tengan noticia fehaciente de atropellos cometidos en el Instituto Próvolo de La Plata, se acerquen a realizar las denuncias pertinentes ante el Vicario de Justicia de este arzobispado, presbítero Javier Fronza, a fin de proceder a las instancias canónicas pertinentes.
Se publica hoy (por el lunes 12 de diciembre), en el diario EL DÍA que una de las víctimas del padre Nicolás Corradi sería Daniel Sgardelis, quien ha denunciado en Salta lo que ha vivido en el Instituto Próvolo de La Plata, y que expondrá su caso ante la Unidad Funcional de Instrucción Nº 4 de delitos conexos con Trata de Personas y Pedofilia de nuestra ciudad. Le ruego por este medio tenga la bondad de radicar también la denuncia ante el Tribunal Eclesiástico de este arzobispado.
Destaco finalmente que la Compañía de María para la Educación de Niños Sordos es una Congregación Religiosa de Derecho Pontificio, y que el cambio de destino de sus miembros es decidido por sus propios superiores religiosos. Los obispos diocesanos sólo podemos negarles las licencias para ejercer el ministerio en la propia diócesis si constan datos comprobados en su contra o graves sospechas».