(AP/InfoCatólica) La bomba estalló durante la misa del domingo en la capilla contigua a la catedral de San Marcos, sede de la iglesia cristiana copta. Por el momento, ningún grupo ha reivindicado la responsabilidad del ataque.
Los ataúdes de las víctimas estaban colocados ante el altar, y los nombres se mostraron a un lado, frente a la congregación.
El líder espiritual de los cristianos ortodoxos de Egipto, el patriarcaTeodoro II, presidió la ceremonia. En un momento de la misma, se apoyó en su bastón y rezó en silencio ante los féretros. El patriarca acortó una visita a Grecia para regresar al país el domingo tras el atentado.
Solo familiares de las víctimas pudieron asistir al acto, celebrado en la iglesia de la Virgen María y San Atanasio, en el suburbio de Nasr City, en el este de El Cairo. Algunos de los asistentes gritaban de dolor, mientras que el resto sollozaba en silencio o se sentaron tristes durante el servicio.
Monjes vestidos de negro, obispos y sacerdotes de la iglesia ortodoxa asistieron al acto del lunes, que fue retransmitido tanto por la televisora estatal como por cadenas privadas.
Hoy lunes se celebrará igualmente un funeral de Estado, en Nasr City, al que asistirá el presidente del país, Abdul Fatá el Sisi.
