(El Mundo/InfoCatólica) Luego de que estallara una bomba en los aledaños de la catedral copta de San Marcos, en El Cairo, al menos 25 personas murieron y otras 31 resultaron heridas.
La Catedral Ortodoxa Copta de San Marcos está considerada como la catedral más importante de Egipto y es la sede del Patriarca de Alejandría, cabeza de la Iglesia Ortodoxa Copta en la actualidad. Se encuentra ubicada en el distrito de Abbaseya o Abbassia, en El Cairo, la capital de Egipto. Por esta razón, muchas veces es llamada la «Catedral de Abbassia». La Catedral de San Marcos es la catedral más grande de África y de Oriente Medio.
Fuentes de la Iglesia Ortodoxa Copta, que profesa alrededor del 8% de la población egipcia, han precisado que la detonación se ha registrado en la iglesia de San Pedro y San Pablo, contigua a la catedral, ubicada en el barrio cairota de Abaseya.
Las fuerzas de seguridad han acordonado los accesos y bloqueado la avenida cercana. Las primeras imágenes difundidas por la prensa local muestran los destrozos ocasionados en el interior del templo y la sangre desperdigada por el suelo del inmueble, incluido en un complejo religioso que suele estar fuertemente protegido por ejército y policía. Los heridos han sido trasladados a dos hospitales cercanos.
El atentado se produce apenas dos días después de dos ataques contra las fuerzas del orden. A primera hora del viernes seis policías fallecieron y otros tres resultaron heridos al estallar una bomba en un puesto de control cerca de las turísticas pirámides de Giza. El artefacto explosivo se hallaba colocado en una papelera.
El ataque fue reivindicado en un mensaje publicado en internet por el Movimiento Hasm, un grupo de reciente creación que en los últimos meses ha sido muy activo en El Cairo y alrededores.
El pasado septiembre, firmó el coche bomba que intentó asesinar al asistente del fiscal general Zakaria Abdelaziz en una urbanización de la capital egipcia.
Un mes antes, trató de matar al líder religioso musulmán Ali Gomaa. Su primera acción se registró el pasado julio cuando segó la vida de un jefe de la policía de la provincia de Al Fayum, al sur de El Cairo.