(Zenit) Los dos imputados –condenados por el tribunal a 18 meses de reclusión para el sacerdote español y 10 meses con suspensión de la pena durante 5 años para Francesca– tenían la posibilidad de apelar a través de sus abogados. Mientras que la fiscalía dispone de 40 días para la lectura de la sentencia para una posible impugnación. Por lo tanto, la sentencia no puede considerarse definitiva hasta que no se cumpla el plazo indicado.
Hasta entonces –según ha indicado el P. Lombardi– Mons. Lucio Vallejo Balda permanecerá en régimen de semilibertad entre los muros de la Ciudad del Vaticano.